El fiscal general de Egipto, Talaat Ibrahim, ordenó este domingo prisión preventiva para el expresidente egipcio Hosni Mubarak por un nuevo caso de corrupción, informó la agencia estatal de noticias Mena.

En este nuevo caso, Mubarak, su mujer, Suzanne Mubarak, y sus hijos Gamal y Alaa están acusados de apropiarse de manera ilícita de los fondos públicos designados para los gastos del palacio presidencial, según la agencia.

La orden de prisión estipulada durante quince días entrará en vigor una vez que venza el periodo de arresto preventivo que Mubarak cumple actualmente por otras causas judiciales.

La justicia egipcia anuló en enero pasado la sentencia por la que Mubarak había sido condenado a cadena perpetua por la muerte de manifestantes durante las revueltas populares de 2011, en las que fue desbancado del poder.

Está previsto que el juicio contra Mubarak se repita el 13 de abril, cuando también volverán a ser procesados por la muerte de manifestantes el exministro del Interior Habib al Adli, condenado a cadena perpetua en la primera sentencia, y seis altos cargos de su departamento, que fueron absueltos.

También se repetirá el juicio contra sus hijos y el empresario Husein Salem —detenido en España— por delitos de enriquecimiento ilícito y por favorecer la exportación de gas a Israel a precios por debajo del valor de mercado.

Mubarak permanece hospitalizado debido a su delicado estado de salud, agravado tras la caída que sufrió en diciembre pasado en el baño de la prisión cairota de Tora.