La Consejería de Educación y Cultura de Extremadura modificará los criterios para otorgar las becas complementarias en el ámbito universitario.

Para ello se publicará un nuevo decreto en el que se reduzcan las exigencias académicas para los estudiantes que accedan al primer curso de la Universidad de Extremadura y tengan una calificación inferior a 6,5 que es la nota que fija el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte para poder acceder a la convocatoria estatal.

Se trata de uno de los acuerdos del Consejo Extraordinario de Gobierno de la comunidad celebrado en Badajoz, y sobre el cual ha informado en rueda de prensa este sábado el presidente regional, José Antonio Monago.

El Ejecutivo autonómico establece estas becas complementarias a las nacionales para "cubrir las necesidades" de aquellos alumnos que se quedan fuera de la convocatoria nacional.

Hasta ahora se fijaban unos umbrales de renta más altos que los contemplados en la convocatoria nacional, para ampliar el número de universitarios con opción a estas ayudas.

Tras analizar las demandas del colectivo estudiantil, el nuevo decreto autonómico flexibilizaría las exigencias académicas de cara al próximo curso por lo que los niveles de renta serían los mismos que los de la convocatoria nacional.

De este modo, aquellos alumnos con calificaciones inferiores a 6,5 tendrían la opción de optar a estas becas autonómicas.

El Gobierno de Extremadura recuerda así que ha incrementado este curso académico un 25% la partida presupuestaria destinada a estas becas complementarias, con una dotación de un millón de euros.

Una subida a la que además se suma la creación de la beca social, una modalidad destinada al alumno que retoma sus estudios universitarios tras abandonarlos por circunstancias muy adversas.

Fracaso escolar

Por otra parte, el Plan de Refuerzo, Estímulo y Motivación para el Alumnado (REMA) se pondrá en marcha el próximo mes de septiembre planteando objetivos a corto, medio y largo plazo.

Es un proyecto de apoyo socioeducativo que busca aunar todos los esfuerzos de la comunidad educativa para disminuir el fracaso escolar parcial, el grave y el abandono educativo temprano y, por consiguiente, acompañar al alumnado en la búsqueda de su éxito educativo.

Según la Administración extremeño, las iniciativas puestas en marcha por diferentes instituciones "no" han conseguido disminuir los altos índices que arrojan estos indicativos, ya que —añade— el 45% del alumnado de 15 años no está en el curso que le corresponde por su edad.

Son alumnos que repiten pero, aún así, el sistema no consigue recuperarlos hecho que se constata en que más de un 30% de jóvenes de entre 18 y 24 años no han realizado estudios de enseñanzas post-obligatorias, explica. Y no sólo es que no continúen dentro del sistema educativo, sino que un 17% de ellos lo abandona sin obtener siquiera el título de graduado en Educación Secundaria Obligatoria, asevera el Ejecutivo regional.

De ahí que el Plan REMA tenga como objetivo principal a corto plazo reducir el fracaso escolar parcial, es decir el número de repetidores. Esta actuación supone disminuir a medio plazo el fracaso escolar grave (alumnado que no consigue el graduado en ESO). Unos objetivos que redundarían a largo plazo en las tasas de abandono educativo temprano. Destinatarios

El Plan REMA actuará sobre el núcleo en el que se producen los primeros síntomas del fracaso escolar.

De ahí que este proyecto esté destinado a los centros educativos de Primaria y Secundaria Obligatoria que escolarizan a un número significativo de alumnos en situación de desventaja socioeducativa. La selección de centros se realizará, por tanto, teniendo en cuenta las tasas de repetición, de promoción, de titulación y de alumnado con necesidad específica de apoyo educativo.

REFUERZO

A diferencia de los planes tradicionales de recuperación que se venían haciendo hasta ahora, este proyecto plantea un refuerzo de las materias instrumentales pero sin atender necesariamente a los contenidos curriculares.

Se trata de un alumnado que necesita el estímulo y la motivación necesaria para desarrollar las competencias básicas, para aprender a aprender sin olvidar el aspecto socioemocional.

De ahí que el Plan REMA plantee una intervención directa con el alumnado, medidas organizativas y curriculares por parte del centro y actuación directa en el entorno y el contexto familiar.

El Gobierno de Extremadura entiende que para que mejoren los resultados académicos del alumnado es "necesario" mejorar sus expectativas y las de su entorno. Es una suma de esfuerzos en la planificación escolar para impulsar hacia ese alumnado hacia el éxito educativo sin que los condicionantes sociales, culturales o económicos determinen su futuro académico.

Los centros educativos adquieren en el Plan REMA un papel "protagonista", ya que serán los encargados de concretar los objetivos y medidas para atender a su diversidad. La Administración facilitará los recursos necesarios para conseguir esos logros mientras que el centro educativo adquiere el compromiso de incrementar las tasas de promoción y titulación de su alumnado, mediante proyectos concretos de mejora.