Andalucía ha registrado en el primer trimestre de 2013 un total de 251 procesos concursales, lo que supone un 14 por ciento menos que en el trimestre anterior —cuarto trimestre de 2012—, según un informe de Crédito y Caución basado en los datos publicados por el Boletín Oficial del Estado (BOE).

Por provincias andaluza, Sevilla registró en el primer trimestre 80 insolvencias judiciales —o procesos concursales—, un 19 por ciento menos; y seguida de Málaga, con 45 procesos, un 41 por ciento menos.

Tras estas dos provincias figura Cádiz, con 44 procedimientos, que vio incrementada en un 52 por ciento el número de procesos en relación con el trimestre anterior; Granada, que con 19 insolvencias judiciales, vio descender el número de casos en un 27 por ciento; y Córdoba, con 18 procedimientos, un 18 por ciento menos que en el trimestre anterior.

Almería, con 17 procedimientos, vio aumentar el número de casos en un 143 por ciento; mientras que en Jaén aumentó un 25 por ciento hasta los 15 procesos en el primer trimestre. Por último, en Huelva el número de procesos concursales descendió un 35 por ciento hasta los 13 procesos.

A nivel nacional, el número de procesos concursales en el primer trimestre de 2013 alcanzó los 2.725 casos, lo que representa un nuevo máximo histórico y un 7,2 por ciento más con respecto a los niveles registrados en el último trimestre de 2012.

Además, según el grupo asegurador, "ningún indicio permite anticipar un cambio en esta evolución de la concursalidad a corto plazo", por lo que, de acuerdo con sus previsiones, los niveles de concursalidad crecerán en 2013 con la intensidad de los dos ejercicios anteriores, "superando por primera vez la barrera de los 10.000 concursos anuales".

Tan solo a partir de 2014, considera que se romperá previsiblemente esta tendencia, en línea con las previsiones de mejora de algunos indicadores clave de la actividad empresarial.

Según el informe, el prototipo de concurso de acreedores es el de una pyme de cerca de 20 trabajadores, y no de reciente creación, que fueron las primeras en padecer los efectos del cambio de entorno en 2008 y 2009, sino un operador consolidado en su sector.

Así, en dos de cada tres casos, la destrucción de tejido productivo está afectando a empresas con más de diez años de antigüedad, que fueron capaces entonces de adaptar sus flujos financieros y su actividad, pero están cada vez más presionadas por la prolongación en el tiempo de la crisis y, en un entorno marcado por la debilidad del consumo interno, su insolvencia judicial se ve propiciada por las dificultades para acceder a nuevas refinanciaciones financieras.

En este entorno, el director del área de Recobros de Crédito y Caución, Miguel Ángel Díaz del Hoyo, considera que hay que "perfeccionar" los sistemas de detección y seguimiento de los riesgos.

SERVICIOS,

El sector que más se dispara

Por sectores, el de servicios registra el mayor crecimiento trimestral de los niveles de concursalidad (22 por ciento), mientras que se registra una tendencia a la baja en sectores tradicionalmente vinculados a la actividad inmobiliaria, como construcción (-7 por ciento), maderas y muebles (-30 por ciento) o electricidad (-13 por ciento).

Por comunidades autónomas, destaca el incremento del 53 por ciento de Madrid, mientras que en Cataluña, que concentra habitualmente el mayor número de concursos debido a su peso en la economía española, se ha producido un aumento del 19 por ciento.

Mientras, Andalucía (-14 por ciento) o la Comunidad Valenciana (-8 por ciento), que cuentan también con un peso importante por el número de procedimientos, registraron descensos en sus niveles de concursalidad.