Representantes de diez gobiernos autonómicos de distinto signo político (Andalucía, Castilla y León, La Rioja, Navarra, Cataluña, País Vasco, Murcia, Galicia, Valencia y Baleares) acudieron ayer a una reunión con el consejero de Justicia, Alfredo Prada, para conocer el funcionamiento de las pulseras antimaltrato.

Este sistema pionero, que la Comunidad ha anunciado a bombo y platillo varias veces desde 2004, avisa a la víctima de la cercanía de su agresor.

Desde abril de 2005, la Comunidad cuenta con 100 brazaletes.

Por ahora, sólo los usan diez mujeres, porque los jueces han puesto reparos en su utilización.