La imputación del expresidente francés Nicolas Sarkozy en el caso Bettencourt es una "experiencia muy dolorosa", explica su esposa, Carla Bruni-Sarkozy en una entrevista publicada en un periódico francés.

"Mi familia y yo lo vivimos como una experiencia muy dolorosa. Es muy difícil no hablar del tema pero también es muy difícil hablar del tema. Me da rabia no poder expresarme", dijo la cantante al periódico Le Figaro, que publicó extractos de una extensa entrevista.

Según Bruni-Sarkozy su marido se siente "sereno y combativo" tras ser imputado el pasado jueves por un delito de abuso de debilidad de Lilliane Bettencourt, la mujer más rica del país y heredera del grupo L'Oréal.

La justicia sospecha que la campaña presidencial de 2007 fue financiada ilegalmente y que el expresidente podría haber abusado de la debilidad de Bettencourt, de avanzada edad y con problemas de salud, para conseguir dinero.

"Vamos a hacer todo lo posible para que la verdad salga a la luz", dijo Bruni-Sarkozy a Le Parisien, que también publica extractos de la entrevista. "Es impensable imaginarse que un hombre como él pueda abusar de la debilidad de una mujer que tiene la edad de su madre", añade.