Los Jardines de Pereda de Santander duplicarán su extensión, pasando de algo más de dos hectáreas a los 47.000 metros cuadrados, con el diseño realizado por el paisajista Fernando Caruncho, que generará un "gran salón" en la plaza de las farolas y respetará la "memoria" de este característico parque de la ciudad cántabra.

Este diseño de los Jardines, que se enmarca en el proyecto global del Centro de Arte y Cultura de la Fundación Botín, se ha presentado este lunes en un acto en el que han estado presentes, además del autor, el alcalde de Santander, Iñigo de la Serna; el director de la Fundación Botín, Iñigo Sáenz de Miera; y el presidente de la Autoridad Portuaria, José Joaquín Martínez Sieso.

Caruncho ha definido el "jardín" que ha diseñado como "la búsqueda del esplendor en la oscuridad del tiempo", y es que la idea que ha desarrollado respeta la "memoria" al tiempo que busca "continuar con el rejuvenecimiento" de estos jardines "para los próximos 100 años".

Además, este "jardinero", que es lo que él se considera, propone "una conexión de la naturaleza con la ciudad", algo que ha calificado de "necesario e imprescindible" aunque "siempre", ha dicho, "manteniendo el origen" de estos Jardines que son "el lugar" que ha inspirado su diseño.

Para este paisajista, la "memoria es la clave", ya que es algo "sagrado" para las personas que han convivido en este entorno, y por ello se mantendrán el quiosco de música, el monumento a José María Pereda, el tiovivo o los árboles emblemáticos, lugares que se "restaurarán y mejorarán".

Las zonas estanciales se duplicarán con el desarrollo de un "gran salón" de unos 4.000 metros cuadrados en la plaza de las Farolas -de donde se eliminará una de las entradas del parking, dejando sólo una entrada y una salida—, la creación de "pequeños rincones" o una zona infantil, que ocupará un "lugar preferente" en una zona soleada , será "más grande" que la actual, y en la que se instalarán "juegos pedagógicos".

Zonas vegetales se triplican

Por otro lado, las zonas vegetales se triplicarán y se harán "totalmente permeables" a Santander, porque Caruncho cree que "una ciudad sin jardín carece de algo esencial". En este sentido, el paisajista ha destacado que las especies vegetales y arbóreas existentes se están "tratando con muchísimo respecto".

Actualmente hay 201 árboles en los Jardines de Pereda, donde finalmente habrá 218. Con las obras, es "inevitable" que algunos de los existentes sufran a pesar de que para prevenirlo se han cubierto los troncos, ha explicado Caruncho, que ha indicado su "intención" es que sobrevivan el "máximo posible".

Entre las variedades que se incorporarán, el paisajista ha señalado que respetarán el "cagigal" por lo que serán tilos, fresnos o magnolias, a los que se sumarán especies arbustivas y pequeños árboles, con lo que se generará una "gran superficie" vegetal.

Por otro lado, Caruncho ha destacado la "importancia" de la luz en este diseño, en el que para los caminos y zonas estanciales utilizará granito, en donde se une la ciudad con el jardín, y en el resto hormigón azul oxidado, un material que no sólo refleja la luz sino que otorgará "una connotación poética" al proyecto, ha ensalzado.

También ha señalado que en los Jardines de Pereda estaban "sobreiluminados", y ha explicado que, aunque se mantendrán algunas luminarias existentes y características de la ciudad, el nuevo alumbrado será LED, que consume menos y genera menos contaminación lumínica, aunque "siempre sin ser excesivo". "Menos contaminación y mejor iluminación", ha apostillado.

"revolución urbana"

Por su parte, De la Serna ha destacado la "revolución urbana" que supone para Santander el proyecto global del Centro de Arte y Cultura de la Fundación Botín, y ha ensalzado que, con esta intervención, se crearán un "gran nuevo espacio" que, además, será "único", en pleno centro de la capital de Cantabria.

En la misma línea, Sáenz de Miera ha manifestado que estos nuevos Jardines se han concebido partiendo de la premisa de "generar el mayor número de usos posible para el mayor número de colectivos y que pueda ser utilizado en el mayor número posible de épocas del año".

Y es que a través de "la atmósfera de un jardín", este diseño es "todo uno" junto con el edificio del Centro de Arte, que, según ha señalado el director de la Fundación, "generará un nuevo espacio en el centro de Santander donde fertilizar las artes con la vida de la ciudad".

Mientras, Martínez Sieso ha considerado que la decisión de soterrar el tráfico de la calle Muelle de Calderón "cambió radicalmente todo" y gracias a ello se cambiará el concepto de los Jardines "acercando la bahía a la ciudad" y transformando de manera "extraordinaria" la zona.