Agentes del Cuerpo Nacional de Policía han detenido a cinco personas que formaban parte de un grupo organizado dedicado a la distribución de cocaína. Los policías se han incautado de efectos, cocaína y sustancia de corte para la adulteración masiva de esta droga.

Los cinco detenidos, todos de origen colombiano, algunos de ellos nacionalizados y unidos por vínculos familiares, se dedicaban a la distribución de cocaína en Pamplona y localidades limítrofes, según ha informado la Policía Nacional en un comunicado.

La investigación se inició hace unos tres meses cuando se tuvo conocimiento de la presencia de un hombre que se dedicaba a la distribución de droga en el barrio de San Juan. C.A.V.V., de 50 años, tenía como única actividad laboral la venta de droga, según la Policía Nacional, que ha destacado que disponía de una red de compradores habituales que acudían a las inmediaciones de su vivienda, lugar desde donde distribuía principalmente cocaína en cantidades variables según las demandas de los compradores.

Según la Policía Nacional, C.A.V.V traía la droga de altísima pureza desde Colombia, donde disponía de los contactos necesarios para su adquisición en origen de partidas para luego ser importada a España y vendida.

Por su parte, E.R.V., de 33 años, sobrino de C.A.V.V., se encargaba de la ocultación de los elementos que la organización tenía para la adulteración de la droga, que se hallaban repartidos en dos viviendas.

Según los agentes, las mediadas de seguridad adoptadas por el grupo podrían calificarse de extremadamente cuidadosas, hasta el punto de que disponían de los elementos de adulteración en aquellas viviendas desde las que no se distribuía la droga al consumidor, para evitar cualquier relación con sus viviendas habituales.

Durante la semana en la que se efectuó el dispositivo de detenciones, la práctica totalidad del 'laboratorio móvil' se hallaba en dos viviendas: la de un miembro de la organización ajeno a las ventas directas, hermano de E.R.V, de 25 años, y otro piso 'de seguridad' que se hallaba en proceso de reformas.

En este último piso se hallaron, oculto entre material de obra, planchas y moldes para la fabricación de ladrillos de cocaína adulterada de 1 kilogramo y 250 gramos, varias básculas de precisión, una máquina de vacío para sellar los paquetes, un molino mezclador de droga y varios recipientes utilizados para las mezclas del estupefaciente, que aún contenía restos de cocaína.

En la otra vivienda de seguridad, ocupaba por el hermano de E.R.V, también colombiano de 25 años, cuyas iniciales son A.R.V., fueron hallados diferentes cantidades de sustancia de corte, así como elementos para la distribución al menudeo de la droga, como alambre para el cierre de las papelinas, básculas de precisión y molinillos con restos blancos donde habían adulterado partidas de droga.

En el domicilio del principal investigado C.A.V.V fue hallado el resto del material que formaba el laboratorio móvil de adulteración de droga, así como la sustancia estupefaciente y sustancia de corte que podría haber sido vendida a los consumidores en más de 7.000 dosis de cocaína.

Además, se encontraron efectos de valor procedentes de la venta de la droga, como dos valiosos relojes que fueron intervenidos. C.A.V.V carecía de cualquier tipo de actividad laboral conocida y tenía la distribución de droga como actividad principal y medio de vida.

Por su parte, la hermana de C.A.V.V, y madre de los otros dos detenidos identificada como L.M.V.V, colombiana de origen y nacionalizada española, efectuaba, según la Policía Nacional, labores de coordinación y recaudación de dinero procedente de las ganancias que sus dos hijos y su hermano obtenían de la venta de cocaína, y se encargaba de enviarla a Colombia mediante giros postales.

En el registro de la vivienda de L.M.V.V fueron decomisados cerca de 4.000 euros en efectivo procedente de las ganancias del negocio ilícito, que aún no habían sido enviados a su país de origen.

Finalmente, L.V.H., colombiana nacionalizada española, de 37 años y sin antecedentes penales, fue también detenida acusada de distribuir a los consumidores de C.A.V.V, las dosis de cocaína que eran solicitadas por los consumidores cuando éste no podía atenderles.

De los cinco detenidos, dos de ellos contaban con antecedentes policiales por diferentes delitos. Los arrestados, junto con el atestado policial instruido, fueron puestos a disposición judicial, decretando el ingreso en prisión de cuatro de ellos, mientras que la droga fue remitida al Área de Sanidad de la Delegación del Gobierno para su análisis y posterior informe.