Unas 200 personas han participado este jueves en la manifestación convocada por la comunidad educativa del colegio 'Elcható' de Brenes (Sevilla), uno de los diez centros de educación diferenciada por sexo de Andalucía afectados por la retirada del concierto anunciada para el próximo curso por parte de la Junta en base a resoluciones judiciales que rechazan subvencionar este modelo pedagógico con fondos públicos.

El portavoz de los padres, Alfonso Adame, ha explicado a Europa Press que los manifestantes, entre los cuales se han contado, además del personal del colegio y alumnas del mismo, simpatizantes de la localidad, el Grupo municipal del PP y, en general, "gente que conoce cómo es la escuela", han marchado por las calles del pueblo desde las instalaciones del colegio hasta el Ayuntamiento, donde se ha llegado en torno a las 18,00 horas para leer un manifiesto.

Precisamente, este jueves las alumnas del colegio Ribamar de Sevilla capital, otro de los centros afectados, han dado lectura a otro manifiesto en sus instalaciones en defensa del mismo y de la "libertad" de las familias para elegir modelo educativo.

Así, en el documento, al que ha tenido acceso Europa Press, el colegio denuncia públicamente "este grave atentado contra la libertad y contra los intereses de los ciudadanos de Sevilla", recordando que Ribamar "siempre se ha adaptado e incluso ha ido por delante de las necesidades educativas de la mujer en nuestra sociedad y, en consecuencia, de cada uno de nosotras, motivo por el cual fue declarado centro de interés social".

Padres y alumnas perciben en Ribamar "una manera original de plantear la educación, innovadora, libre y sin prejuicios", ya que el colegio "está abierto a todo el mundo". "No es fácil que en un centro educativo haya tan gran diversidad como en éste", subrayan, añadiendo que "la coexistencia de tantas alumnas con diferentes edades, mentalidades e intereses es una de sus riquezas y sus particularidades".

Por ello, se rechazan los "clichés" sobre "el modelo pedagógico en el que nos estamos educando". Ribamar, culminan, "no puede de ninguna manera dejar de ser lo que ha sido, lo que es ahora; no hay derecho a que se prive a la sociedad sevillana de un centro educativo con tan reconocido prestigio y que tanto ha trabajado y trabaja por la cualificación profesional e inserción laboral de la mujer en Andalucía".