El presidente de la Junta Central Fallera (JCF) y concejal de Fiestas del Ayuntamiento de Valencia, Francisco Lledó, ha asegurado que respeta la decisión de la falla Ceramista Ros-José María Mortes Lerma de retirar los elementos de su monumento fallero que pudieran "inducir a pensar" que se trataba de símbolos religiosos que podían herir la "susceptibilidad devocional" de los hindúes, que había formulado una protesta. "Lo que queremos los falleros es tener la fiesta en paz", ha recalcado el edil.

Lledó ha hecho estas declaraciones este martes antes de asistir a la última 'mascletà' de estas fiestas en el balcón del Ayuntamiento de Valencia, donde ha explicado que el objetivo de la falla ha sido "homenajear" a las figuras "representativas" de la cultura hindú "y no el de ofender sentimientos culturales o religiosos de la comunidad hinduista".

El concejal ha indicado que lo que se ha acordado entre las partes implicadas —JCF, comisión fallera y el Templo Hindú— es eliminar del monumento cualquier elemento que pudiera inducir a pensar que fuera un símbolo u objeto religioso o que "pudieran herir la susceptibilidad devocional de los hindúes". Además, ha asegurado que la falla ha acordado "indultar" el 'Shiva Nataraja' y concederlo como donación al Templo Hindú-Sivananda Mandir, en la plaza del Patriarca de Valencia.

Lledó ha explicado que la falla "en aras a no tener más polémica ha considerado que, por quitar unos elementos religiosos, de alguna forma se pacifica todo un poco". Lledó ha añadido que fue una decisión tomada por la Junta Central Fallera y que la respeta "completamente". De este modo, las partes han quedado satisfechas y, por lo tanto, queda zanjada la polémica, porque "precisamente las fallas antes homenajean" que tratan de ofender, ha recalcado.