La Comunitat Valenciana cerró 2012 con un aumento de la litigiosidad laboral del 7,6 por ciento respecto a 2009, frente al repunte del 19,6 por ciento registrado a nivel estatal.

Así lo recoge el indicador AML Afi-Asempleo, que refleja un aumento de los salarios pactados por convenio en un 1,7 por ciento, 0,7 puntos por debajo de la subida del IPC (+2,4%), de modo que lo que esta autonomía "pierde poder adquisitivo de forma muy intensa".

Según esos datos, en 2012 se presentaron 16.529 demandas por despido en esta autonomía, lo que supone un descenso del 10,9 por ciento y 2.019 menos que en 2009, el año de la crisis en el que hubo un mayor número de demandas por despido.

Este indicador señala, sin embargo, que se espera que la ratio de demandas por despido por cada 100 personas despedidas, que refleja los índices de litigiosidad, sea mayor en 2012 que en 2009.

Al respecto, apunta que 2012 cerraría con 16,60 demandas por cada 100 personas despedidas, mientras que en 2009 se registraron 15,44 demandas por cada cien despidos, un 7,6 por ciento más.

A nivel estatal, el informe constata que la litigiosidad laboral ha ascendido a las 18 demandas por cada 100 despidos, mientras que el promedio en 2009, durante la anterior etapa de recesión, era de 16,2 demandas.

En ese primer año en vigor de la reforma laboral, los mayores aumentos de la litigiosidad se localizaron en Madrid (+69%), Castilla y León (+44%) y País Vasco (+40,5%), donde estos casos pasaron de las alrededor de 15 demandas de 2009 al entorno de los 25 litigios por cada 100 despidos actuales.

Destrucción de 300.000

Empleos en el primer trimestre

En cuanto al primer trimestre de 2013, señala que la economía española cerrará este período con más de 300.000 empleos destruidos, una corrección similar a la del mismo periodo del pasado año, según AML Afi-Asempleo, que avanza una caída interanual de la ocupación del 4,6 por ciento en marzo, hasta 16,6 millones de personas ocupadas.

La patronal de las empresas de trabajo temporal estima sin embargo que el positivo efecto estacional de la Semana Santa debería permitir un moderado aumento de la afiliación, para retornar a caídas interanuales cercanas al 4,2 por ciento antes del verano.

Por otro lado, el informe reserva un apartado a la relación entre la tasa de paro y las vacantes de empleo por cada 100 habitantes, indicador que se denomina 'La Curva de Beveridge'.

Reducción de los puestos de trabajo disponibles

Al respecto, señala que a medida que ha evolucionado la crisis, el deterioro de la actividad económica ha derivado en una reducción de los puestos de trabajo disponibles, hasta el punto de que en el promedio 2005-2008 había algo más de 20 parados por vacante, mientras que en el tercer trimestre de 2012 —último dato disponible—, la relación era de 107 parados por cada puesto de trabajo disponible.

"En la medida en que la actividad económica no mejore, corremos el riesgo de que la tasa de paro se enquiste en los elevados niveles en los que se encuentra en la actualidad", añade.