Realizan el primer trasplante de un dedo del pie a la mano de un paciente en el sistema sanitario público vasco

Un equipo de cirugía plástica del Hospital de Cruces (Barakaldo) ha realizado el primer trasplante de un dedo de un pie a la mano de un paciente que se ha llevado a cabo en el sistema sanitario público vasco.
El equipo cirujano acompaña al transplantado
El equipo cirujano acompaña al transplantado
EUROPA PRESS
El equipo cirujano acompaña al transplantado

Un equipo de cirugía plástica del Hospital de Cruces (Barakaldo) ha realizado el primer trasplante de un dedo de un pie a la mano de un paciente que se ha llevado a cabo en el sistema sanitario público vasco.

La intervención se practicó el pasado 25 de febrero a un paciente de 57 años que tuvo un accidente doméstico con un cortacésped, en el que sufrió una "amputación traumática" de los cuatro dedos de la mano derecha, lo que se cataloga como "una lesión catastrófica".

En rueda de prensa, Juan José García, cirujano plástico que ha llevado a cabo la operación, ha explicado que el planteamiento quirúrgico ha consistido en restablecer una mano con "al menos dos dedos" para lograr "una pinza digital".

"(El paciente) Se podía poner el calcetín utilizando el dedo pulgar como si fuese un gancho, simplemente ejerciendo presión sobre el propio calcetín para ponérselo en el pie, pero no podía cogerlo para subírselo. Estaba muy limitado", ha enfatizado.

García ha añadido que el equipo de cirugía plástica decidió hacer la trasposición del segundo dedo de uno de los pies, el más largo de los que hay. En este caso, ha dicho, "no se ha tratado solamente de reconstruir un defecto, sino que debía ser funcional, para lo que se abordó la reconstrucción de otras estructuras como los tendones, el hueso y los nervios".

Según sus palabras, la operación, que ha sido un éxito, se lleva haciendo desde hace décadas en centros muy especializados con "gente preparada y con entrenamiento de años".

Por su parte, el trasplantado, Juan Carlos García, que a partir de ahora deberá hacer sesiones de rehabilitación, ha mostrado su satisfacción por el resultado de la operación. Tras incidir que atarse los zapatos "era complicado", ha recordado que la amputación de los dedos fue en la mano derecha, y que él es diestro, por lo que ha tenido que aprender a manejarse con la izquierda hasta ahora. "Gracias a la operación mejorará mi calidad de vida", ha resaltado.

En tono jocoso, García ha afirmado que es técnico comercial, y que su empresa le mantiene "el puesto de trabajo". "Y eso es importante", ha ironizado.

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