El Ayuntamiento de Girona reabrirá la próxima semana la oficina de atención a los vecinos afectados por las obras de la alta velocidad en la plaza Europa, en la "zona cero".

De hecho, la oficina ya existía pero estaba ubicada en otro punto de la ciudad y ahora el consistorio ha decidido situarla en el punto más complicado de las obras.

"Queremos conseguir la máxima difusión e implicación de los vecinos, aunque reconocemos que llegamos tarde", ha manifestado el concejal de Urbanismo y Actividades del Ayuntamiento de Girona, Carles Ribas, este viernes durante una rueda de prensa para explicar las actuaciones previstas próximamente en la zona de las obras del AVE.

Con la nueva ubicación, Girona espera que haya una mayor colaboración entre vecinos y Ayuntamiento, ya que en la oficina trabajará un aparejador externo al consistorio que estará allí diariamente para atender cualquier duda y conocer en cada momento la evolución de los trabajos que se están haciendo en torno a la estación de tren y el parque Central.

En la oficina, según ha detallado Ribas, también se podrá consultar toda la información de los proyectos que se vayan iniciando en relación a las obras de la alta velocidad, como podría ser el inicio de los trabajos de las rampas que darán acceso al parking subterráneo o la recuperación del paso entre la calle Bisbe Sivilla y la estación del tren.

"Servirá para informar a pie de obra", ha remarcado el concejal, que también ha añadido que a partir de ahora habrá un cambio en la política de comunicación en relación a las obras de la alta velocidad.

Para ello se convocará una rueda de prensa cada quince días y se emitirán, también cada dos semanas, folletos informativos con el objetivo de dar el máximo de información a todos los vecinos afectados por las obras.

"no nos quedaremos parados"

Ribas ha recordado que el Ayuntamiento ha exigido a Adif y Fomento que en diciembre de este año estén acabados todos los trabajos de reposición que hay pendientes en la ciudad, tanto en la zona de la Devesa, como en el parque Central o en las demás ubicaciones afectadas por las obras del AVE.

También ha pedido sensibilidad al Gobierno, ya que la ciudad lleva aguantando los trabajos cuatro años y medio cuando las obras tenían que haber durado 33 meses.

"Pedimos que se pongan la misma eficacia y los mismos recursos que se destinaron a terminar la estación del AVE a la reposición que tiene que hacerse en la ciudad", ha expuesto, recordando que la llegada de la alta velocidad no estaba prevista hasta julio de 2013 y los trenes pasan por Girona desde principios de año.

Finalmente, Ribas ha recalcado que el consistorio "no se quedará parado", y ha dejado claro que las reposiciones que tienen que hacerse no servirán como compensaciones, ya que hay muchos vecinos y comerciantes afectados que merecen una compensación económica, urbanística o del tipo que sea.