La dirección de la empresa mixta de limpieza Limasa y los trabajadores vuelven a reunirse este viernes con el árbitro designado por el Consejo Andaluz de Relaciones Laborales (CARL) de la Junta, Jesús Cruz Villalón, para llegar a un acuerdo en el conflicto surgido a raíz de la pretensión de la sociedad de cambiar los descansos y las vacaciones de los empleados fijos para minimizar las contrataciones de eventuales.

El distanciamiento entre ambas partes es evidente, pese a los intentos para llegar a un acuerdo por parte de este catedrático en Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social, que ya se reunió el pasado lunes en el Servicio Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales de Andalucía (Sercla) con empresa y trabajadores.

La dirección defiende la necesidad de cambiar los descansos y las vacaciones de la plantilla fija para reducir los contratos eventuales y hacer frente así al recorte de seis millones de euros que tiene este año Limasa por parte del Ayuntamiento —el 49 por ciento del accionariado es municipal, mientras que el 51 por ciento restante corresponde a los socios privados—.

Por el contrario, los representantes de los trabajadores exigen el cumplimiento de los acuerdos adoptados hace un año para evitar la huelga de limpieza y que no se desvinculen los artículos 25 y 26, relativos a los descansos y las vacaciones, de la negociación del nuevo convenio colectivo.

HUELGA

De hecho, aunque hubiera un acuerdo en el asunto de los descansos y las vacaciones, la plantilla insiste en su malestar a raíz, precisamente, del "incumplimiento" de lo firmado hace un año. Así, los trabajadores celebrarán este sábado una asamblea, en la que decidirán si convocan una huelga de basuras en Semana Santa.

"No podemos seguir en esta situación; no hay forma de negociar con la dirección, que firma unos acuerdos y luego los interpreta de otra manera", han manifestado a Europa Press desde el comité de empresa. Más aún, consideran esta actitud una "provocación", planteándose, incluso, que lo que intentan "sea abocarnos a que haya una huelga" y, como han advertido, "no vamos a permitir chantajes".

Por otra parte, este pasado miércoles tuvo lugar la novena reunión de la mesa negociadora del nuevo convenio colectivo de Limasa desde su constitución a comienzos de este año, un encuentro en el que la dirección y el comité de empresa mostraron nuevamente su distanciamiento.

El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, confió este pasado jueves, por su parte, en "la capacidad de diálogo, el sentido común y el amor a la ciudad" para acabar con las discrepancias entre la dirección y los trabajadores de Limasa y evitar así que éstos últimos pudieran convocar una huelga en plena Semana Santa.