El Ayuntamiento de Bilbao ha trasladado su "dolor y consternación" a los familiares y allegados del varón de 50 años fallecido este miércoles en la villa tras arrojarse por la ventana del piso en el que vívía de alquiler cuando iba a ser desahuciado. Además, ha pedido la paralización de los procesos de ejecución de desahucios que afecten a personas o familias en situación de riesgo y exclusión.

En un documento firmado por los portavoces de todos los grupos municipales (PNV, PSE, Bildu y PP) y por el alcalde, Iñaki Azkuna, el Ayuntamiento se compromete a actuar en casos de desahucios a través de sus Servicios Sociales, Viviendas Municipales y equipos de intervención psicológica para atender las situaciones que se puedan producir y para prevenir casos de riesgo. En esta línea, ofrece los servicios municipales para colaborar con los entornos familiares y personales para prevenir situaciones "de riesgo vital".

Por otro lado, el Ayuntamiento considera que instituciones y organizaciones públicas y privadas, así como el conjunto de la sociedad, deben comprometerse para "atajar la realidad de los desahucios y sus consecuencias para todas las personas en situación de vulnerabilidad".

Derecho a la vivienda

"Todas las personas deben tener garantizadas unas condiciones de vida justas y dignas, garantizando el derecho a la vivienda", recoge el texto enviado por el Ayuntamiento.

Por último, desde el Consistorio ofrecen su disposición a colaborar y articular fórmulas conjuntamente con el ámbito judicial para tratar de prevenir este tipo de situaciones de riesgo.