La Audiencia Provincial ha condenado a dos años de cárcel y una multa de 490 euros a un hombre de 35 años, vecino de Calahorra y de nacionalidad marroquí, como autor de un delito de tráfico de drogas y contra la salud pública, tras ser interceptado en un control de la Guardia Civil el 24 septiembre de 2011.

La sentencia a la que ha tenido acceso Europa Press considera como probado que el condenado portaba dos bolsas de cocaína de 0,3 gramos cada una y era propietario de una bolsa de 5,28 gramos de heroína que había escondido en el respaldo del asiento del vehículo al percatarse de la presencia de los agentes.

Estos agentes se encontraban realizando un control selectivo de vehículos y personas en el Polígono Tejerías de Calahorra, zona donde se efectúan pequeñas operaciones de venta ilícita de sustancias estupefacientes, cuando procedieron a "dar el alto" al coche en el que se encontraba el acusado.

Éste, según el relato de los agentes, "llevó a cabo unos gestos con las manos al introducírselas, por una parte en los pantalones, y por otra después de sacarlas de los mismos, dirigirlas hacia el respaldo del asiento donde se encontraba".

Tras salir los ocupantes del vehículos, se realizó un cacheo al sospechoso encontrando de ese modo que el acusado llevaba junto con la goma del calzoncillo las dos citabas bolsas de cocaína.

Por ese motivo, y en atención a los movimientos extraños que el acusado había efectuado en el respaldo del asiento que ocupaba dentro del vehículo, procedieron a realizar un registro de esa parte del mismo donde encontraron en la zona de unión de respaldo del asiento la bolsa de heroína.