Un agente del Cuerpo Nacional de Policía resultó afectado por inhalación de humo al intervenir, durante el incendio que tuvo lugar en la madrugada del pasado martes en una vivienda de Benalmádena (Málaga), en las labores de rescate de una mujer de 41 años y de su hija de siete años.

El incendio se produjo sobre las 05.25 horas en una vivienda ubicada en un edificio de la calle Palma del Río. Las heridas, como ya se informó en su momento, presentaban síntomas de intoxicación por inhalación de humo, mientras que el agente tuvo que ser hospitalizado para recibir tratamiento en una cámara hiperbárica.

La intervención policial permitió la evacuación de todos los vecinos del edificio, entre ellos una mujer mayor y su nieta, que se habían quedado en el interior de la vivienda colindante con el piso siniestrado, han informado desde la Policía Nacional en un comunicado.

Agentes pertenecientes al Grupo de Atención al Ciudadano se encontraban patrullando por la zona de la estupa budista de Benalmádena cuando se percataron de un fuerte olor a humo, aunque, debido a la niebla existente, no podían precisar el origen.

Mientras intentaban localizar la procedencia del humo recibieron un aviso del 091 que alertaba sobre un incendio en un bloque. La comunicante, a través del sistema Emergencias 112 Andalucía, indicó que en el interior estaban una madre y su hija de corta edad, según han indicado desde la Policía Nacional.

Los agentes decidieron, ante el inminente riesgo para la vida de las personas, acceder al edificio. En el portal se encontraron con un denso humo pero, a pesar de ello, decidieron subir hasta la tercera planta donde se encontraba la vivienda incendiada. Una vez en el lugar comenzaron a extinguir las llamas utilizando hasta seis extintores, y consiguieron evacuar a sus inquilinas, una mujer y su hija, que ya presentaban síntomas de intoxicación por inhalación de humo.

También intentaron, durante varios minutos, que los vecinos del piso colindante abrieran la puerta, aunque no lo consiguieron. Ante la certeza de que en su interior había una señora mayor de origen chino y un niño de corta edad insistieron golpeando la puerta hasta que abrieron y lograron evacuarles y trasladarles a un lugar seguro.

Los policías comprobaron que en el resto de las viviendas no había nadie, pero mientras estaban actuando escucharon, del interior de la vivienda incendiada, un sonido similar a un gemido de un bebé, por lo que, ante la posibilidad de que en el interior hubiera quedado otra persona, y ayudándose de una manguera facilitada por un vecino del piso superior, uno de los agentes volvió a acceder a la vivienda aunque la cantidad de humo se lo impedía.

Minutos más tarde llegaron al lugar dotaciones de bomberos, quienes extrajeron el humo y extinguieron el incendio, comprobando que en el interior no había ninguna persona, sólo un gato, han puntualizado a través de un comunicado, en el que han informado de que fueron estas mismas dotaciones las que habían asistido, esa misma noche, a las víctimas de un accidente de tráfico en la autovía A-7, a la altura del núcleo benalmadense de Arroyo de la Miel, en el que fallecieron dos personas y resultaron heridas otras tres.