Una mujer residente en El Molar testificó este miércoles ante el tribunal de la Aundiencia Provincial que su pareja la intentó vender cuando era menor de edad a un proxeneta a cambio de 700 euros ante su negativa de ejercer la prostitución para pagarla una supuesta deuda por el viaje para traerla a España.

En su declaración ante el tribunal, la joven relató que conoció al procesado, Marcel M., en Rumanía cuando tenía 9 años y que comenzó una relación de pareja. Según su testimonio, comenzó a sufrir abusos con esa edad, hechos que llegó incluso a denunciar en su país.

A pesar de ello, cuando él se trasladó a España en 2003 y le ofreció que se fuera con él para cuidar a sus hijos, la chica accedió pensando que él "había cambiado". El acusado le pagó entonces el billete y los trámites necesarios para el viaje.

Un mes después, Marcel  comenzó a exigirla los 400 euros que había costado su billete y le ordenó que entrase en un club de prostitución. "Si no aprendía español, me decía que me iba a vender por 700 euros. Tenía miedo. Abandoné la casa porque tenía miedo. Decía que cuando me pillara, me iba a matar", relató la afectada.

El 7 de marzo de 2004, decidió poner fin a la relación y se cobijó en casa de un amigo. Ese mismo día, el procesado se presentó en la casa del hombre y le cortó en la mano con una cuchilla. A continuación y al saber que el hombre había puesto una denuncia, el agresor huyó a Francia. Desde allí comenzó a llamar a la mujer amenazándola de muerte y asegurando que le prendería fuego, por lo que ella presentó otra denuncia.

Marcel reconoció ante el tribunal que acogió a la chica, pero negó que la obligase a prostituirse y calificó de "broma" los pasquines que repartió por el municipio de Pedrezuela ofreciendo los servicios de la joven.

La fiscal del caso ha solicitado que se condene al acusado a 11 años de prisión por amenazas continuadas, inducción a la prostitución y obstrucción a la Justicia. El abogado defensor afirma que no hay pruebas contra su cliente.