Una decena de mercados tradicionales están al borde del cierre en la capital

  • El plan para reformar y reflotar estos espacios que el Ayuntamiento presentó hace un año no ha recibido ni un solo euro de los presupuestos.
  • El Consistorio ha actuado en 39 mercados, pero no tiene dinero para el resto.
  • Contrasta el moderno aspecto y los precios elevados de los puestos de San Antón o San Miguel con los de Properidad u Orcasur, alejados del centro.
Puestos vacíos en el mercado de Bami, situado en Ciudad Lineal.
Puestos vacíos en el mercado de Bami, situado en Ciudad Lineal.
JORGE PARÍS
Puestos vacíos en el mercado de Bami, situado en Ciudad Lineal.

El contraste es claro. Por un lado, la vanguardia y el diseño del mercado de San Antón (Centro). Por el otro, la desolación del mercado municipal de Bami (Ciudad Lineal).

Son los dos extremos de la situación en la que se encuentran los 46 mercados municipales de la capital madrileña, de los cuales al menos una decena luchan contra el abandono, ya sea por la escasez de clientes o por la falta de ayudas del Gobierno local.

El Ayuntamiento inició en 2003 un plan de rehabilitación de estos espacios. Hasta el momento ha actuado en 39 de ellos. Hace un año presentó un segundo plan para reformar los que quedaban.

"Sin embargo, todavía no ha consignado ni un solo euro para la ejecución de este plan, ni en los presupuestos de este año ni en los del próximo. El motivo es claro: no hay dinero, por lo que muchas de estas galerías están condenadas a desaparecer", explica un portavoz del PSOE municipal.

Estos son las que están en peor situación.

Prosperidad (Chamartín). La ocupación de sus puestos apenas supera el 50%, según la asociación de comerciantes de la galería, que lleva cuatro años esperando unas ayudas que no llegan.

Bami (Ciudad Lineal). Solo cuenta con ocho puestos abiertos, cuando hace unos años tenía más de 50. "Mis padres abrieron esta frutería en 1954. Cada vez hay menos clientes", explica Ana Alonso, una de las tenderas que todavía resisten allí.

San Cristóbal (Chamartín). IU califica el equipamiento de "insostenible". Solo quedan 11 de los 44 comercios disponibles. El Consistorio llegó a un acuerdo con la asociación de comerciantes el pasado junio para la concesión por un año del espacio a la espera de que se concrete un nuevo concurso.

Orcasur (Villaverde). "A esto le queda ya muy poca vida. Solo somos 18 de los 70 puestos originales. En enero desaparecieron tres y el Ayuntamiento dice que no hay dinero. No tenemos ni para pagar la calefacción", asegura Domingo Ruiz, presidente del mercado.

Nueva Numancia (Vallecas). En 2003 el Consistorio reformó el espacio cediendo una planta a una gran superficie. No funcionó. Aún quedan 30 puestos abiertos, pero la nueva concesionaria ha aumentado el precio del alquiler, lo que ha ocasionado fuertes críticas de  los comerciantes, que se ven incapaces de poder pagarlo.

Mercado de La Cebada (Centro). Lleva años esperando por una reforma que incluya la tan  demandada piscina. El último proyecto, anunciado aproximadamente hace un año, planteaba una privatización, pero todavía ninguna empresa se ha ofrecido voluntaria.

La Guindalera. Alejando Esteban, presidente del mercado, asegura que la situación no es tan mala como la descrita por 20 minutos el 11 de febrero. "Vemos la botella medio llena", asegura, aunque reconoce que la crisis afecta: "Los comerciantes estamos invirtiendo sin saber si el Consistorio va a ayudarnos, solo nos ha dado una subvención para arreglar el tejado", manifiesta.

Sin mercados en los PAU

Los PAU de Las Tablas y Sanchinarro no cuentan con ningún comercio de cercanía. En su último plan, el Consistorio planeó la construcción de un mercado municipal en cada barrio. De momento, solo hay dos parcelas vacías sin ninguna obra a la vista. Por su parte, los comerciantes de Barceló (Centro) esperan en un edificio provisional a que el Ayuntamiento termine las obras (llevan 11 meses de retraso) del nuevo centro polivalente, que podría estar listo este año.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento