La localidad sevillana de Alanís, enclavada en la Sierra Norte de la provincia, ha vuelto a quedar comunicada por carretera después de que en las últimas horas se haya reabierto al tráfico la A-447, que une al municipio con Fuente Obejuna (Córdoba) y que era la única vía que aún permanecía cortada como consecuencia de la intensa nevada registrada este jueves, que ha ocasionado "daños y pérdidas" para el sector agrario de la localidad que el Ayuntamiento va a proceder ahora a evaluar.

Así lo ha indicado este sábado a Europa Press el alcalde de Alanís, Cecilio Fuentes (PA), que ha puntualizado que aunque ya se ha restablecido el tráfico en las carreteras que conectan con el municipio, hay que circular "con especial precaución" en la citada A-447 a partir del kilómetro cuatro.

Por lo demás, ha recordado que el Consistorio ha invitado a los vecinos, a través de un bando, a informar de las pérdidas que han podido sufrir como consecuencia de la nieve caída. Para ello ha establecido un plazo que concluirá este próximo jueves día 7, fecha a partir de la cual el Ayuntamiento decidirá si solicita "formalmente" al Gobierno la declaración del municipio como "zona de emergencia" o "zona de actuación preferente".

En ese sentido, Fuentes ha señalado que ya ha establecido unos primeros contactos tanto con la Delegación del Gobierno central como con la de la Junta de Andalucía en Sevilla, si bien su intención es esperar hasta haber recabado toda la documentación aportada por los vecinos para evaluar y concretar los daños sufridos y, en función de eso, solicitar a las administraciones aludidas las actuaciones correspondientes.

En todo caso, el regidor apunta que, "a primera vista", las pérdidas sufridas podrían ser "muy importantes", según tuvo la ocasión de comprobar este viernes en persona, cuando recorrió las zonas del municipio más afectadas por el temporal.

Tras lamentar que esos daños afectarían a un sector, en referencia al agrario, que "ya afronta una situación dramática", el alcalde de Alanís ha confirmado, por otra parte, que tanto el suministro eléctrico como el de agua, que sufrieron incidencias como consecuencia de la nevada, ya funcionan con total normalidad.