El presidente de la Ejecutiva provincial del PSOE de Cádiz, Manuel Jiménez Barrios, ha declinado retractarse de las declaraciones que, con motivo del caso Bárcenas, realizó en su día sobre la condición de tesorero del PP gaditano y andaluz de Aurelio Romero, tras efectuar éste "un requerimiento notarial para que rectifique".

Según ha explicado a Europa Press, el socialista se acoge al derecho fundamental a la libertad de expresión consagrado en el artículo 20 de la Constitución en el que enmarca sus declaraciones y las preguntas que realizaba sobre "si guarda relación su condición de tesorero con el hecho de que figurase como perceptor de 6.000 euros en la lista de Bárcenas publicada por El País".

Indica Jiménez Barrios que ha contestado al 'popular' jerezano con un burofax en el que "deja claro" que realizó sus declaraciones en calidad de presidente del PSOE de Cádiz y parlamentario andaluz hacia Aurelio Romero, "tesorero del PP de Cádiz y del PP de Andalucía, y por lo tanto, personaje público".

Afirma el socialista que no era su intención "desmerecer su dignidad ni como persona ni como profesional, sino que estaban referidas a su condición de tesorero nada más y nada menos que del PP, y tras haber aparecido en la supuesta contabilidad de su homólogo nacional, Luis Bárcenas, investigado por la Justicia".

Se trataba, por tanto, de una exigencia de explicaciones que el diputado socialista hace extensiva al presidente del PP, Antonio Sanz, y a la alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez, que "también figura como receptora de 30.000 euros en ese lamentable estadillo publicado por los medios".

El presidente del PSOE gaditano ha criticado que en el PP "no son capaces de querellarse contra Bárcenas y pretenden hacerlo contra los que preguntamos en nombre de los ciudadanos". "Todo el mundo se pregunta aún si es dinero negro o no, quién ponía el dinero, por qué cobraban sobresueldos". "Hay demasiados interrogantes sin aclarar", ha espetado,

por lo que "urgen explicaciones".

Finalmente, Jiménez Barrios ha asegurado que "no nos van a callar mientras no ofrezcan las explicaciones que todo el mundo está esperando" y critica que "cuando desgraciadamente nos toca a nosotros los socialistas, el PP no tiene piedad", afeando que tengan "mandíbula de cristal cuando les toca a ellos y puño de hierro cuando le toca al adversario".