El vicepresidente primero y consejero de Bienestar, Sanidad y Dependencia del Cabildo, Aurelio Abreu, lamenta los datos hechos públicos sobre las listas de espera quirúrgica en la sanidad de Canarias, que asciende a 30.000 personas, de las cuales un alto porcentaje pertenece a los complejos hospitalarios de la isla.

"Los recortes realizados por el Gobierno Central en esta materia han derivado en la desprotección total y absoluta para miles de canarios y tinerfeños que ven cada día como uno de los principales derechos constitucionales, como es el Derecho a la Protección de la Salud, se coarta una y otra vez", señala en una nota.

Abreu afirma también que a esto se suma el "colapso" que sufren las urgencias hospitalarias y que redunda en una falta de control por la que es el ciudadano "quien sale perjudicado".

"Ya es hora de que todas las administraciones aunemos esfuerzos para conseguir lo que se espera de nosotros, que no es otra cosa que el bienestar de la sociedad tinerfeña", explica.

Asimismo, recuerda que el Cabildo de Tenerife no tiene competencias en Sanidad, "pero sí que tiene la competencia, e incluso la obligación de procurar que las grandes infraestructuras hospitalarias de la isla sean una realidad, que los hospitales del Norte y del Sur estén a pleno rendimiento lo antes posible para poder dar así respuesta a las urgencias sanitarias y quirúrgicas de estas zonas de la isla".

Destaca, en este sentido, que ya se han implantado muchas de las consultas externas en el complejo hospitalario de Icod de los Vinos, pero no se debe "descansar" hasta que esté funcionando al "cien por cien".

PRIORIDADES

Aurelio Abreu manifiesta también su estupor "ante la tranquilidad con la que se hacen oídos sordos al hecho de que la sanidad de Tenerife, de Canarias, de España, necesita más recursos, se trata de una prioridad irrenunciable en la que todos tienen que poner de su parte, ya sea el Gobierno del Estado como el Gobierno de Canarias".

Por otro lado, valora al equipo de "magníficos profesionales" que trabajan en los hospitales de la isla, "ya que son ellos los que, ante los impedimentos de presupuestos con los que se han encontrado, realizan incluso tareas administrativas en aras de hacer valer el compromiso que adquirieron en su día con la sanidad pública".