Un enfermero ha ratificado este lunes ante el juez que Ester Quintana no presentaba restos de ningún objeto ni de suciedad en el ojo que supuestamente le lesionó una pelota de goma de los Mossos d'Esquadra durante la huelga general del 14 de noviembre de 2012.

El hombre que atendió a la víctima en el hospital ha asegurado que no le encontró ningún corte ni restos de lo que podría haber sido un objeto contundente lanzado por manifestantes.

Este relato refuerza la teoría de que fue una bola de goma lanzada por los Mossos la que impactó en la manifestante.

Igualmente, una periodista que grababa imágenes en el lugar y momento de los hechos ha explicado que escuchó una salva y un disparo de los Mossos procedentes de la confluencia entre la Gran Via con el Passeig de Gràcia de Barcelona.

Hasta el momento, el Departament d'Interior de la Generalitat siempre ha negado que Ester Quintana perdiera el ojo a raiz de un proyectil de goma disparado por los Mossos. De hecho, asegura que la policía catalana no disparó en este tipo de balas en la zona donde quedó herida.