El ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón, ha explicado en el Congreso de los Diputados que a la hora de tomar la decisión del indulto al kamikaze condenado a trece años de cárcel por la muerte de una persona en 2003 en Alzira (Valencia), el Ejecutivo "sopesó todos los elementos" y "dudó como en todos los indultos", pero que se ha limitado a seguir "el camino" que marcó el Gobierno anterior.

El diputado Joaquín Puig Ferrer, del PSOE, le ha preguntado por las motivaciones de la medida de gracia y el ministro ha citado, entre otras, que el condenado tenía "epilepsia" diagnosticada por el servicio público de salud de Castilla-La Mancha, que se arrepintió, que no tenía antecedentes y el centro penitenciario informó favorablemente; además, ha dicho que el Ejecutivo ha tenido en cuenta "el sufrimiento de las familias de las víctimas" a la hora de pronunciarse.

Puig le ha acusado entonces por hacer suyos los argumentos de la defensa, que el Tribunal Supremo echó atrás: "Dijo que no era sí".

"Ha dado la versión que dio la defensa y dio el indulto en contra de los informes de la fiscalía", le ha echado en cara el parlamentario, citando en ese momento que en el bufete de abogados que se encargó de defender al kamikaze trabaja el hijo del ministro de Justicia, así como el hermano del popular Ignacio Astarloa.

El ministro de Justicia ha dicho además que en el expediente del indulto "no figura" el despacho en el que trabajan los abogados, "ni este ministro lo conocía, ni en éste, ni en ningún caso", ha aclarado, aunque el nombre del letrado defensor, Esteban Astarloa, que pertenece al bufete Uría y Menéndez, sí puede consultarse en la sentencia. "Si conociera cómo funciona un despacho de 530 abogados y cómo lo hace el ministerio, no tendría ninguna duda", ha añadido.

"Ustedes nos marcaron el camino", ha continuado Ruiz Gallardón, aludiendo a que el Gobierno fue "ver qué se había hecho antes" y comprobó que con el Ejecutivo anterior se había tomado la misma decisión en un caso similar.

"Encontré unas coincidencias, dos delitos por seguridad vial, con penas de 12 años y seis meses y 13 años el segundo, y conducción kamikaze en ambos, con resultado de muerte, y en las dos alegaciones para pedir indulto, epilepsia", ha relatado. El indulto al que se refiere se concedió el pasado 16 de septiembre de 2011, pocos meses antes de que Zapatero abandonase la presidencia, ha indicado el ministro.

El indultado entonces, Carlos Anzúlez Carreras, fue condenado por la Audiencia Provincial de Valladolid en 2001 como autor de un delito de conducción temeraria en concurso con un delito de homicidio y otros dos de lesiones y con una falta de lesiones, a la pena de doce años, seis meses y un día de prisión. Los hechos tuvieron lugar en 1997 y el indulto, total, se concedió "a condición de que no vuelva a cometer delito doloso en el plazo de cuatro años desde la publicación del real decreto".

El texto del indulto concedido por el Gobierno de Rajoy, también publicado en el BOE, explicaba que el kamikaze fue condenado por la Audiencia Provincial de Valencia en 2011 "como autor de un delito de conducción con grave desprecio para la vida de los demás en concurso ideal con un delito de homicidio, un delito de lesiones, una falta de lesiones y una falta de daños" por los hechos que tuvieron lugar en 2003.

La pena de trece años de cárcel le fue conmutada "por otra de dos años de multa, que se satisfará en cuotas diarias de seis euros". Puig ha acusado al ministro de Justicia de no haber "tenido la decencia de explicar qué ha pasado" hasta este miércoles.