Los miembros del Consell Valencià de Cultura (CVC) han acordado reflejar por escrito una petición para reclamar "no ser discriminados" en el anteproyecto del Gobierno valenciano que prevé la modificación de la entidad y la reducción de su número de componentes, al igual que el de otras instituciones estatutarias.

Así se ha decidido en la sesión plenaria que la institución normativa ha celebrado este miércoles y en la que se ha aprobado por unanimidad poner por escrito una propuesta lanzada por el consejero Martín Quirós para que la futura norma trate a los miembros del CVC "en igualdad de condiciones y sin discriminación" respecto a los integrantes de otras instituciones democráticas, en concreto las Corts Valencianes.

En este sentido, Martín Quirós ha cuestionado que el cambio en la composición de los miembros del organismo consultivo pueda suponer la disolución instantánea del mismo y ha considerado que lo lógico sería que las modificaciones en el CVC se realizaran aprovechando los períodos marcados para la renovación de miembros, tal y como se hace en el parlamento valenciano. "También se ha hablado de reducir el número de diputados en las Corts pero para eso hay que esperar al fin de un mandato, no se hace una disolución inmediata", ha planteado.

Por tanto, ha defendido que actuar de forma distinta en el CVC "sería un abuso de poder". "Y una democracia se caracteriza por la igualdad de trato y de aplicación de las normas jurídicas". "Queremos que se aplique los mismo que en las Corts, que se haga en los momentos que proceda, en el término de los mandatos", ha insistido.

Martín Quirós ha agregado al término del pleno que piensa redactar este escrito "a la mayor brevedad posible" con el fin de que la institución pueda remitirlo a las instancias políticas que considere convenientes.

La de Martín Quirós no ha sido la única voz crítica en la sesión, ya que Glòria Marcos ha puesto sobre la mesa la necesidad de elaborar un dictamen jurídico sobre la propuesta para cambiar la ley del CVC. Algunos consejeros enfatizan la contradicción que puede suponer que sea el Consell quien elimine a unos miembros que han sido elegidos por otra institución, como es la de las Corts.

Por otra parte, en la reunión el CVC también ha informado de que ha ejecutado el 63 por ciento del presupuesto asignado para 2012 —que era de algo más de 1.696.000 euros— pese a que no recibe la asignación de la Generalitat desde hace tres años. Así se ha puesto de relieve al tratar la aprobación del Informe Económico del CVC correspondiente al segundo semestre de 2012.

El secretario de la entidad, Jesús Huguet, ha detallado que el presupuesto "teórico" con el que la institución contaba para el pasado ejercicio era de cerca de 1,7 millones, de los que se ha ejecutado aproximadamente el 63 por ciento (1.123.000 euros).

REMANENTES

Esto ha sido posible gracias a los remanentes que ha ido acumulando la institución, a la que el Consell debe la asignación de los últimos tres años, desde 2010 a 2012. Fuentes del CVC han destacado que este ahorro se ha generado por la política de gasto "muy restrictiva" que ha desarrollado siempre el órgano.

Sin la aportación del Gobierno valenciano, los ingresos de los que ha dado cuenta Huguet en la sesión de hoy son de poco más de 38.000 euros, correspondientes a la venta de las publicaciones del CVC y al pago de una partida procedente del programa europeo 'Paisajes de guerra'.

De la misma forma, se ha dado luz verde a las bases de régimen presupuestario, contable y de contratación administrativa de la institución para 2013, que únicamente presentan como novedad, respecto a ejercicios anteriores, la inclusión del pago de 2.000 a los autores de los cómics que edita el Consell de Cultura.