El delantero colombiano del Atlético de Madrid, Radamel Falcao, sufrió una inocentada que fue emitida el 28 de diciembre durante la Gala Inocente, Inocente, en la cual su compañero de equipo Adrián López ejerció de 'gancho'.

Tras los cinco tantos marcados por Falcao ante el Deportivo de la Coruña, el colombiano visitó un concesionario de la marca Ferrari acompañado por Adrián, donde el director del mismo les facilitó un ejemplar del Ferrari Spider, valorado en 450.000 euros, para que lo pudieran probar.

Con todos los papeles en regla, Falcao y Adrián fueron a comer a un restaurante de Boadilla del Monte, 'equivocándose' a la hora de aparcar el coche y dejándolo en un lugar reservado para el reciclaje de vehículos.

Así, el colombiano pensó que le habían robado el coche hasta que le enseñaron el amasijo de hierros en el que se había convertido el Ferrari. Falcao se tomó con humor y resignación la broma.