Los partidos políticos han hecho lecturas muy diferentes del discurso navideño del monarca. Desde las visiones más críticas de los partidos nacionalistas catalanes, del PCE o incluso UPyD, hasta la visión más complaciente del PSOE y el PP.

El vicesecretario general de Organización y Electoral del PP, Carlos Floriano, ha valorado el mensaje del rey, en el que volvió a demostrar "por qué es el jefe del Estado" al identificar "perfectamente" cuáles son los problemas que amenazan a España y atisbar las soluciones.

En declaraciones difundidas por su partido, Floriano se ha referido al discurso del monarca y ha asegurado que don Juan Carlos identificó los problemas y fue capaz de "atisbar cuáles son los caminos para ser capaces de dar respuesta" a esas dificultades.

Entre esas soluciones, Floriano ha mencionado "la confianza en nosotros mismos y en las potencialidades de nuestro país para resolver los problemas que tenemos y también para ser capaces de seguir siendo referencia en Iberoamérica y en Europa".

Por su parte, la secretaria de Política Social del PSOE, Trinidad Jiménez, ha destacado el llamamiento para que los políticos trabajen juntos  y ha resaltado su "cercanía" hacia los problemas de la gente.

"El discurso es muy ajustado a la realidad política, social y económica de nuestro país", según Jiménez, que ha subrayado la petición de la "fortaleza necesaria" entre los partidos políticos e instituciones para que "todos" trabajen "unidos para salir adelante".

En cuanto a su apelación a la "política con mayúsculas" y preguntada sobre si los partidos deben hacer una autocrítica tras esas palabras, Jiménez ha insistido únicamente en afirmar que el discurso del rey supone "una apelación habitual", aunque sí "un llamamiento para trabajar juntos".

Trinidad Jiménez ha comentado también la "proximidad" transmitida por el rey hacia los jóvenes sin empleo y sin expectativas laborales de futuro y hacia la gente que lo pasa mal.

La portavoz de UPyD, Rosa Díez, ha considerado que el mensaje de Navidad del rey fue "demasiado políticamente correcto" y ha echado en falta que el monarca se refiriera, entre otros asuntos, a la "pulsión secesionista" de la Generalitat de Cataluña que "rompe el marco de convivencia".

Díez ha opinado que en el discurso "hubo cosas" que el rey "no dijo y que en un momento de tremenda crisis política como la que vivimos" ella ha "echado en falta".

En un tiempo de profunda crisis política, se espera "más" del jefe del Estado, ha dicho la máxima responsable de UPyD, quien, de todos modos, ha resaltado del mensaje la "inequívoca reivindicación" de la política para salir de la crisis y enfrentarse a los problemas del país.

Díez comparte con don Juan Carlos que "todo no es economía", una frase con la que se siente plenamente identificada, pero ha asegurado que a esa afirmación "le ha faltado desarrollo" porque ante la pregunta de qué hay que hacer, el rey "se ha limitado a repasar los lugares comunes".

"Me parece que la referencia a los grandes pactos es demasiado genérica para el momento que atravesamos", ha continuado Díez, quien ha echado en falta referencias claras a la crisis de valores, a la corrupción política, a la pulsión secesionista porque rompe el marco de convivencia, a la necesidad de una justicia independiente y rápida y al fortalecimiento de las instituciones democráticas.

A su juicio, una simple referencia a que "hay que cumplir la ley", está "muy por debajo de lo que se espera" del monarca.

El jefe del Estado, al igual que ninguna otra institución, "no se puede permitir estar de adorno en este momento", ha enfatizado la portavoz de UPyD, para quien el monarca "no ha estado suficientemente a la altura".

El secretario general del PCE, José Luis Centella, ha criticado que en su mensaje navideño el rey no hiciera mención directa a quienes este año han perdido su empleo o su vivienda y no hablara de un reparto justo de los sacrificios entre quienes han provocado la crisis y quienes la sufren.

En un comunicado, Centella ha definido el discurso de anoche de "insulso, agotado y falto de ideas", y en el que, a su juicio, lo único noticiable era el cambio de escenografía al mostrar al jefe del Estado apoyado en una mesa.

"Es realmente significativo que en todo el discurso no existiera ni una sola mención directa a quienes este año perdieron su empleo o su vivienda", según el secretario del PCE, que ha echado en falta una mención "a la necesidad de poner en valor la ética como elemento fundamental para recuperar la credibilidad de la actividad política".

Para Jose Luis Centella, es precisamente desde "la política con mayúscula" a la que se refirió el rey desde la que se tienen que reclamar los cambios constitucionales que superen "el modelo agotado de la Constitución de 1978", marco degradado, según él, por quienes la modificaron de espaldas a la ciudadanía para anteponer el pago de la deuda bancaria al interés general".

Para el PCE "nunca se ha evidenciado tanto" como en este discurso que estamos ante el final de un ciclo histórico y que la Monarquía "no tiene capacidad para remontar la crisis desde una visión social que ponga la economía al servicio de la mayoría para frenar el sufrimiento de la población".

El portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban, ha afirmado en Bilbao que el respeto a la ley "está bien", pero que la ley debe abrir cauces para que la voluntad popular de Euskadi y Cataluña pueda expresarse dentro del ordenamiento jurídico.

En su primer acto como portavoz del Grupo Vasco, Esteban ha considerado que el contenido del discurso del rey está alejado del día a día de los ciudadanos.

En lo referido a la petición de respeto muto y lealtad recíproca en base al marco pactado en la Transición, ha sostenido que en los últimos 30 años "de lealtad y respeto no ha habido nada para las competencias autonómicas y ese pacto ha sido continuamente horadado".

En cuanto a las referencias a la crisis económica, Esteban ha dicho haber apreciado "cierta resignación" ante la crisis y una "aceptación de un Estado español como en los años 60, un país algo retrasado respecto al resto".

Ha asegurado que no se puede pedir "confianza" a las personas que han perdido o pueden perder su trabajo ni hablar de no hacer recortes sociales cuando "el ciudadano, año tras año, ve recortes en los derechos sociales por el Gobierno de turno".

Respecto a la defensa de la "gran política con mayúsculas", el diputado nacionalista ha opinado que el rey y la Monarquía son "la institución menos apropiada para hablar de ética personal con los acontecimientos de los últimos años, lo que hace que el discurso carezca de credibilidad".

No obstante, ha recalcado que el Gobierno Vasco "ha obrado correctamente" al respetar la autonomía de la dirección de ETB para decidir su programación.