Una treintena de propietarios de vivienda protegida pertenecientes a la Asociación 'Isbilya 583VPO' se han concentrado en la mañana de este sábado ante las puertas de la oficina de Bankia en la avenida de la Constitución de Sevilla en protesta por lo que consideran "actitud abusiva" de la entidad bancaria en relación a la firma de hipotecas de sus VPO, con condiciones "abusivas e irregulares".

Fuentes de la asociación han indicado a Europa Press que los concentrados han permanecido ante la sucursal durante "aproximadamente dos horas" con gritos y pancartas.

En un comunicado, la asociación ha asegurado que después de "más de dos años de retraso" en la entrega de 583 viviendas que fueron adjudicadas en 2008; ahora Bankia, el banco promotor, está "exigiendo condiciones abusivas e irregulares para la firma del préstamo hipotecario"; que los adjudicatarios "se ven obligados a firmar para poder recibir la subvención establecida para las viviendas de protección oficial", ya que "si decidieran firmar con otro banco, es muy probable que perdieran estas ayudas".

Entre estas condiciones, señalan el hecho de que se impone el pago de una provisión de fondos de 1.500 euros para propietarios que firmen sin aval y de 3.000 euros para los que sí lleven avalista o que se obligue a contratar los servicios de la gestoría Garsa (propiedad de Bankia), "cobrando ésta unos honorarios de 425 euros cuando el coste de este servicio suele rondar los 200 euros".

Asimismo, afirman que "se ha pedido a los propietarios el pago de dos letras de la hipoteca 'atrasadas', a la firma del contrato, como si se hubiera firmado la misma en el mes de octubre, en lugar de diciembre". En ese sentido, los vecinos han relacionado esta "extraña" petición con el hecho de que en octubre "venciera el préstamo que la promotora contrajo con Bankia".

Los vecinos han emprendido acciones legales contra la promotora de las VPO, Fundación para el Progreso del Sur de Europa, fundación creada por la Confederación de Empresarios de Sevilla, como con la constructora —Dolmen, ahora Nazarí—, por las "numerosas irregularidades cometidas", según ha informado la asociación en un comunicado.