El alcalde de Barcelona, Xavier Trias, ha inaugurado este martes un edificio con 25 apartamentos temporales de 40 metros cuadrados para familias desahuciadas o en situación de vulnerabilidad en cuanto a la vivienda.

Dos de estos están adaptados a discapacitados, y todos cuentan con un dormitorio con dos camas, un sofá, un comedor con mesa, nevera, microondas y ventanas que dan una gran luminosidad, y en el exterior contarán con una zona de convivencia y neveras comunitarias.

Se priorizará alojar a aquellas con niños y pendientes de la adjudicación de una vivienda de alquiler social por parte de la Mesa de Emergencias Sociales —hay 15 familias en este proceso que podrían ser los primeros inquilinos del equipamiento de Navas—, y los beneficiados podrán vivir allí hasta que se les derive a otro recurso. El tiempo máximo de estancia será de seis meses; pasado este límite, y si no han podido trasladarse a otra modalidad de vivienda, se les adjudicará una vivienda social.

Se trata del primer equipamiento municipal de este tipo, un edificio de nueva planta que se empezó a construir en el anterior mandato y que forma parte del llamado complejo Navas, que incluye pisos para ancianos —estrenados recientemente—, un centro cívico, una guardería y la sede de la asociación de vecinos. El siguiente paso será el proceso de selección de las primeras familias que entren a vivir en estos por parte de los Servicios Sociales y una comisión sectorial del Área de Calidad de Vida.

El Gobierno municipal de CiU prevé que un segundo edificio en la confluencia de las calles Londres y Villarroel, en el barrio del Eixample —edificado en el anterior mandato, liderado por el PSC, para albergar pisos para estudiantes— ofrezca otros 40 alojamientos temporales para familias una vez se hayan acabado las obras de adecuación, que será a finales de 2013, según el consistorio.

Trias también ha avanzado la apertura de un tercer equipamiento con la misma finalidad, pero con habitaciones individuales —una cincuentena, según han informado fuentes del gobierno— en un edificio de la orden religiosa Sant Joan de Déu en el distrito de Sarrià-Sant Gervasi que se prevé que entre en funcionamiento en febrero.

Preguntado por los contactos con entidades financieras para buscar soluciones a los desahuciados en la ciudad, Trias ha señalado que aún espera una respuesta, pero ha asegurado que muchas de estas entidades "buscan acuerdos sociales" con los afectados. El alcalde ha asegurado que el Gobierno municipal "solo puede presionar" en este sentido, pero que no tiene competencia para decidir, aunque ha reiterado la petición de que el Ayuntamiento gestione los pisos vacíos en manos del banco malo.