Con un resultado tan abierto, el futuro Govern está en manos de las posibles coaliciones estables o de los apoyos puntuales. La mayoría absoluta se sitúa en los 68 diputados, y puede obtenerse de varias maneras distintas.

Algunos partidos, durante la campaña, ya cerraron las puertas a coaliciones. Es el caso de Ciu, que firmó ante notario que no pactaría con el PP.

Con la inesperada irrupción de Ciutadans per Catalunya, el debate y las especulaciones en torno al futuro gobierno están más vivas que nunca. Se abre el tiempo de negociación y pactos que dará a finales de este mes o principios del que viene un nuevo presidente. Todo es posible:

El PSC, pese a no ser la fuerza más votada, podría gobernar con Esquerra Republicana e Iniciativa per Catalunya. En la posible coalición solo ha aumentado escaños ICV, que pasa de tener 9 diputados a 12. El portavoz de ERC en el Congreso de los Diputados, Joan Puigcercós, sería favorable a esta opción.

El PSC ha bajado, pero Montilla aspira a gobernar , dejando fuera a CiU. Según Montilla, CiU ha fracasado al intentar convertir la campaña en un plebiscito sobre el tripartito, y ha llegado la hora de "dialogar y pactar"

CiU ha aumentado dos escaños. El descontento de Zapatero con ERC podría hacer pactar a los republicanos (con 21 diputados) con los conservadores, resultando un gobierno catalanista, pero de doble signo. CiU y ERC han evidenciado en varias ocasiones sus diferencias. Según los analistas, es la opción preferida por Carod Rovira.

Una coalición de grandes partidos superaría sobradamente el umbral de la mayoría absoluta. Entre los dos sumarían 85 escaños y podría abrir la puerta a pactos en Madrid, dejando fuera a ERC.

Algunos analistas opinan que este pacto sería inevitable si las presiones de ERC (que se considera la llave de cualquier gobierno) y de una crecida ICV son muy fuertes. El gobierno resultante tendría una mayoría aplastante en el Parlament y un claro apoyo del sector empresarial.

El carácter conservador de CiU juega en contra de esta fórmula, que también podría servir para un gobierno con apoyos puntuales.

Los grandes partidos podrían gobernar con apoyos puntuales según las necesidades y las iniciativas parlamentarias. Una opción parecida a la del PSOE en el Congreso de los Diputados, que no gobierna en coalición con ningún partido pese a no tener la mayoría absoluta.

En este escenario, CiU podría pactar con el PP, pero también con ERC. Lo mismo pasaría con el PSC y el resto de partidos.