El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha avanzado este jueves que estudia cambios legales para poder hacer pública una lista con los "mayores defraudadores o morosos" al fisco, independientemente de la posición social o económica que tengan.

Durante el debate en el pleno del Senado del proyecto de ley de medidas tributarias dirigidas a la consolidación fiscal, Montoro ha explicado que esta medida ya funciona en otros países europeos como Reino Unido o Irlanda.

El objetivo de dar publicidad a los nombres de los evasores fiscales es incentivar que acaben pagando sus deudas con la Hacienda pública. "Se trata de que paguen, no lo puedo decir más claro y en plata. La lucha contra el fraude descansa, en buena medida, en el cumplimiento voluntario de las obligaciones fiscales y en la conciencia social del daño que genera el fraude fiscal", ha afirmado el ministro. Con este fin "se están estudiando los parámetros objetivos que mejor pudieran servir para configurar tanto el listado de defraudadores como la identificación de los morosos".

El ministro ha recalcado que la mayor transparencia de la administración debe aplicarse también a los contribuyentes a la Hacienda Pública, con independencia del tipo de actividad económica que desarrollen o sin son personas físicas o jurídicas. "No se puede entender tanto sigilo en algunas entidades empresariales o contribuyentes individuales que no dan prioridad al pago de los impuestos", ha subrayado.

Por otra parte, Montoro ha defendido las novedades introducidas en el Senado en el proyecto de ley de medidas tributarias, entre las que figura la creación de un nuevo impuesto estatal sobre depósitos en entidades financieras y un nuevo régimen fiscal para penalizar las elevadas indemnizaciones por despido que cobran algunos ejecutivos.

Sobre el primero ha dicho que se ha creado para evitar que las comunidades autónomas apliquen por su cuenta impuestos similares a la banca que deriven en una segmentación del mercado, aunque ha advertido que el Gobierno estudia la posibilidad de no dejar el tributo a tipo cero y subirlo a un tipo "moderado". De la penalización fiscal a las indemnizaciones laborales altas, ha explicado que se trata de introducir una mayor equidad tributaria respecto a los contratos blindados, que -según ha dicho- muchas veces se saltan los "principios más elementales" de buen gobierno corporativo al no ser comunicados a los accionistas.

Al margen de las novedades destacadas por Montoro, el proyecto de ley incluye la eliminación de la deducción por vivienda, la prórroga del impuesto sobre el patrimonio, la limitación de la deducción por amortización al 70%, el alza del gravamen para las plusvalías a corto plazo y un nuevo impuesto del 20% para los premios superiores a 2.500 euros de Loterías, Cruz Roja y la ONCE.

El proyecto ha sido aprobado por el pleno del Senado con los votos favorables del PP, que previamente había rechazado los vetos a la totalidad presentados por IU, Entesa y el grupo socialista.

En el debate el senador socialista Juan María Vázquez ha apoyado la idea de publicar una lista de grandes morosos, pero ha criticado el proyecto de ley de medidas tributarias: "La sensación es que están haciendo pagar a los que ya pagan", mientras que por ejemplo se mantiene "vendiendo la Marca España" al arquitecto valenciano Santiago Calatrava, que se ha trasladado a Suiza. También ha sido crítico el senador de CiU Ferran Bel, entre otros motivos porque "se está creando un impuesto estatal a través de una enmienda en el Senado", en referencia a la tasa sobre depósitos bancarios para evitar que cada autonomía tenga una tasa propia.