El sobrino, ya detenido, de los ancianos de Santiago de La Ribera (Murcia) hallados muertos en su casa este jueves, confesó que primero mató a su tío porque no le decía dónde estaba el dinero y después a su tía para que no se quedara sola, según ha explicado el delegado del Gobierno, Joaquín Bascuñana.

El sobrino, que fue arrestado a las 21.00 horas del sábado por la Guardia Civil, inicialmente no se declaró culpable de los hechos, pero finalmente se derrumbó y dijo que había pedido dinero a su tío, pero éste se negó a dárselo y, al no señalar el lugar en el que lo tenía guardado, lo mató durante la discusión.

El delegado del Gobierno en Murcia condenó este "tan vil crimen", con el agravante de que haya sido un familiar el presunto autor, al tiempo que felicitó a la Guardia Civil por haberlo resuelto en poco tiempo.

Además apuntó la tranquilidad que da a los vecinos el que se haya resuelto este crimen "que ninguno hubiéramos querido que ocurriera", afirmó Bascuñana, quien anunció que el lunes previsiblemente será puesto a disposición judicial el presunto autor, y que también se sabrá el informe de las autopsias.

Según informó este domingo el instituto armado, el detenido, J.M.R.C., tiene 28 años y también reside en la localidad murciana donde se produjo el crimen.

Los cadáveres fueron hallados el jueves por la tarde por la mujer que los cuidaba, que encontró a la mujer en la cama y al hombre en un sillón, así como la puerta abierta.