El secretario regional del PSOE, Emiliano García-Page, ha advertido este viernes que no pretende "bajo ningún concepto" que se "especule" con la posibilidad de que opte a abanderar el PSOE nacional, y ha asegurado que sólo tomará una decisión sobre este asunto, "del tipo que sea", en el momento en que "se abran los procesos".

A preguntas de los medios sobre el proceso de renovación del PSOE nacional, García-Page ha indicado que "cuando llegue el momento y se abran los procesos de selección de candidaturas cada uno irá tomando decisiones".

A su juicio, el PSOE "tiene mucha gente preparada, muchos conocidos y muchos desconocidos", y él forma parte de un proyecto colectivo y su interés, ha asegurado, es que "se abra esa agenda de cambio en el PSOE porque lo necesita la sociedad española".

Dicho esto, ha incidido en que su principal responsabilidad es ser secretario general de Castilla-La Mancha. "Le dedico mi actividad institucional a la ciudad de Toledo pero mi actividad partidaria a Castilla-La Mancha y desde esa responsabilidad es desde la que estoy planteando la inquietud de que se produzcan estos cambios".

Psoe fuerte

Según García-Page, al país le interesa que el PSOE sea un partido "fuerte y solvente" y más de cara a los tiempos que vienen. "El PSOE tiene que ocupar un papel de centralidad y esa fortaleza tiene que ver con una renovación en el campo ideológico y en sus planteamientos y mensajes y probablemente en sus personas".

Una renovación que el dirigente socialista castellano-manchego cree que debe producirse "antes de las municipales y autonómicas", aunque ha incidido en que el calendario que importa ahora es "el de la crisis". "Sólo cuando eso esté encauzado o tengamos una acción definitiva podremos empezar a plantearnos calendarios", ha sugerido.