Después del 'tsunami blanco' en la Sanidad -una parte de los médicos especialistas mantiene aún una huelga indefinida convocada por Afem-, la universidad de referencia en España ha tomado el relevo de las protestas en la calle contra los recortes.

Este miércoles, más de cien profesores de la Universidad Complutense de Madrid sacaron sus clases de las facultades para protestar por el 'tasazo' (la multiplicación del precio de los créditos de las asignaturas y de los máster) y el recorte presupuestario ejecutado por la Comunidad de Madrid.

El Paseo de Coches del Retiro, la Puerta del Sol, el centro cultural La Casa Encendida, la sede de Ecologistas en Acción, el Ateneo de Madrid, el Centro Social Autogestionado La Casa del Barrio de Carabanchel o varios cafés y librerías acogieron las lecciones fuera de programa abiertas a todo el público de los docentes.

Los estudiantes más afortunados asistieron a las lecciones a cubierto. En las calles, decenas de ellos se arremolinaron en torno a los profesores mientras trataban de paliar las bajas temperaturas que registraba la ciudad mediante abrigos, guantes y bufandas.

"El frío y el viento no han podido con nosotros. Clase de protesta del profesor Eugenio Gillani", contaba Silvia Ayerdi desde la Plaza de Felipe II. "Un lujazo tener a Jorge Riechmann dando clase de protesta en Sol", se felicitaba Orlan Cazorla. Para María Vallejo, estudiante de la Universidad Carlos III, otras universidades deberían haber imitado la protesta para denunciar los recortes.

La iniciativa, denominada #launienlacalle o #lacompluenlacalle, ha partido de un grupo de estudiantes y docentes y está apoyada por el rector y máximo responsable de la institución, José Carrillo. Con ella pretenden reivindicar "la labor docente" de los profesionales universitarios y hacer una defensa de la universidad pública "frente a las graves amenazas que sufre".

El año que viene, según los presupuestos para la Comunidad de Madrid para 2013, la Complutense pierde 250 profesores y 47 millones de euros. Las inversiones prácticamente no existen y la actividad investigadora queda reducida al mínimo. "Muchos programas se han parado porque el dinero no llega. No tenemos para más ni nos autorizan gastos porque los recortes lo impiden", explicó un doctorando a 20minutos.es.

Aunque la Comunidad de Madrid viene recortando la dotación de las universidades públicas en los últimos cuatro años, el presidente regional, Ignacio González, justificó que el verdadero problema de la Complutense es la deuda de 150 millones de euros que tiene fruto, a su juicio, de "una gestión económica caótica" y "disparatada" del anterior rector, Carlos Berzosa.

González añadió que su Ejecutivo dedica "algo más de 800 millones de euros" a las universidades durante el presente ejercicio.