El portavoz de IU en el Ayuntamiento de Burgos, Raúl Salinero, ha afirmado este miércoles que existen una serie "irregularidades" en las obras acometidas en el aparcamiento subterráneo del Museo de la Evolución Humana (MEH) por valor de 30.000 euros, con el objetivo de trasladar a esta ubicación algunas de las dependencias municipales del aparcamiento de Santo Cildes, que prevé enajenar el consistorio.

En este sentido, ha asegurado que el concejal de Obras, Santiago González Braceras, ha llevado a cabo la remodelación del aparcamiento "a las bravas" a través de la sociedad municipal Parkmusa, pese a la "negativa" de los técnicos del Ayuntamiento de Burgos, que mostraron en varias ocasiones su disconformidad al traslado, dado que el aparcamiento del MEH es de titularidad de la Junta de Castilla y León y no reunía las condiciones necesarias para albergar los usos planteados.

Al respecto, ha señalado que las obras realizadas disminuyen el número de plazas de aparcamiento ofertadas, lo que contraviene al convenio suscrito por el Ayuntamiento de Burgos y la Junta para la explotación del mismo por un periodo de 20 años.

Asimismo, ha insistido en que la remodelación "se ha concedido a dedo" y, al carecer de licencia, no se ha cumplido los trámites precisos, entre los que se encuentra el asesoramiento de Bomberos, algo necesario al haber modificado el plan de evacuación de la instalación, por lo que ha instado al equipo de Gobierno local a que abra una investigación que esclarezca todos los hechos.

Por otro lado, ha asegurado que desde IU ya se denunciaron estas "ilegalidades" en la última Comisión Municipal de Licencias, en la que su responsable, Dolores Calleja, aseguró desconocer las obras.

Finalmente, ha mostrado su preocupación por la "opacidad" de la sociedad municipal Parkmusa, en la que no están representados los partidos en la oposición, a la vez que ha recordado que sus máximos responsables, entre los que se encuentran el alcalde, Javier Lacalle; el vicealcalde, Ángel Ibáñez; y la propia concejal de Licencias, Dolores Calleja, no informaron de las contradicciones que se acometían con las obras planteadas.