El Espanyol ha anunciado la rescisión del contrato de Mauricio Pochettino, como entrenador del equipo después de casi cuatro años como máximo responsable del banquillo blanquiazul, debido a la delicada situación deportiva del conjunto, colista en la clasificación de la Liga.

El club presidido por Joan Collet tampoco contará a partir de ahora con el director deportivo del club, Ramón Planas, quien también ha cesado en sus funciones.

Desde hacía varias jornadas, el futuro de Pochettino era motivo de debate. De todas formas, la directiva siempre ratificó al preparador hispano-argentino y le mostró su confianza.

La derrota de este domingo ante el Getafe en Cornellá-El Prat (0-2) fue el detonante para provocar su salida de la entidad blanquiazul. El club no ha anunciado quien será el técnico que se hará cargo del equipo.

El ya exentrenador del RCD Espanyol Mauricio Pochettino ha asegurado en su despedida como técnico espanyolista que ha llegado a un acuerdo de rescisión de contrato de mutuo acuerdo para el club porque lo ve positivo, espera que todo le vaya bien al equipo y ha asegurado que le hubiera gustado continuar, por lo que "ojalá" pueda volver en algún momento a un club que es su "casa y familia".

"Como dije en 2006 en mi despedida como jugador, estaré siempre a disposición del club para lo que necesite y siempre encontrarán en mí a alguien en quien apoyarse y a quien recurrir. Ojalá algún día pueda volver porque siento a este club como casa y es mi familia, será un orgullo para mí poder ir por el mundo diciendo que somos 'pericos' de Barcelona", manifestó en rueda de prensa acompañado por cuerpo técnico y buena parte de la plantilla, como Verdú, Cristian Álvarez, Raúl Rodríguez, Stuani, Javi López o Forlín.

Para Pochettino, el Espanyol merece cosas buenas e importantes y estará como socio y accionista "apoyando". "No tengo duda de que estos futbolistas van a tirar del carro adelante y van a generar la ilusión que merece el club. Este club es mi casa y me ha visto nacer y crecer como entrenador, es algo que llevaré en el corazón y nunca podré dejar de lado", aseveró.

El técnico blanquiazul aseguró que ha puesto "todo" en la parrilla para que funcionara su proyecto, pero junto al club y presidente, Joan Collet, han tomado la decisión que creen más acertada. "Hemos tomado una decisión desde la responsabilidad, de mutuo acuerdo, pensando que va a ser positivo este cambio y que también hace falta ese punto y nexo en la gente, una unión que tiene que existir", recordó como ha hecho últimamente en ruedas de prensa.

El argentino, casi parafraseando a su colega Pep Guardiola cuando dejó el FC Barcelona, aseguró que ha tenido "desgaste" y que ahora necesita recuperarse de una "montaña rusa" que es el Espanyol. "Han sido cuatro años a un nivel de desgaste importante, a veces escuchando a vecinos decir que uno se vacía cuando ganas, imagina cuando no logras tantos éxitos, imagina la presión que existe. Hemos vivido una montaña rusa constante y ese estrés se acaba pagando", reconoció.

"Abandonar es un hecho triste, pero siempre es en beneficio del club y del equipo, es mi prioridad. No tengo ninguna duda de que el equipo va a tirar adelante pese a los malos números porque es espectacular. No hemos tenido suerte y sí cosas negativas en este inicio de temporada. Es un poco de frustración e impotencia de tu gente, tus futbolistas, directivos y afición. Somos una gran familia y cuando las cosas no salen como queremos sufrimos todos", argumentó.

Por otro lado, ha reconocido haber perdonado un año de contrato para el bien del club, cumpliendo así con la palabra dada. "Lo dije en su momento y lo he reflejado. Los hechos hablan más que las palabras", comentó sobre su renuncia al segundo año de contrato que le quedaba y que ha renunciado a cobrar, por lo que su indemnización será lo que le quedaba por recibir de esta temporada.