La historia se repite, pero de forma masiva. En octubre de 2011 el periodista y bloguero Pablo Herreros lanzaba una campaña en Internet para presionar a los anunciantes del programa La Noria para que retiraran su publicidad del espacio de Telecinco, después de que la madre de El Cuco, el menor implicado en la desaparición de Marta del Castillo, fuera entrevistada en el programa y recibiera dinero por ello.

Aquella campaña provocó que los anunciantes del programa, uno por uno, fueran retirando su publicidad de La Noria, por lo que finalmente Telecinco se vio obligado a retirar el espacio presentado por Jordi González, además de otros dos programas: Enemigos íntimos y Resistiré, ¿vale?, en lo que se consideró un lavado de imagen de la cadena.

Sin embargo, para Telecinco el asunto no quedó ahí, tras el regreso de los anunciantes, sino que interpuso una demanda el pasado julio contra Pablo Herreros por supuestos delitos de amenazas y coacciones y ahora, el periodista y bloguero ha sido citado para declarar en el juzgado número 14 de Madrid el próximo 4 de diciembre por la citada demanda.

Y de nuevo ha surgido una iniciativa popular para presionar a los anunciantes de Telecinco y por tanto a la cadena para que retire la demanda a Herreros. En esta ocasión ha sido el periodista Mario Tascón el que ha iniciado la movilización, a través de la plataforma de peticiones online Change.org.

Lejos de enfriarse, la petición para que los anunciantes retiren su apoyo a la cadena conseguía que más de 32.000 personas firmaran en menos de 24 horas esta petición, las mismas que apoyaron la campaña de Pablo Herreros en tres semanas, por lo que los usuarios de Internet han respondido más rápido que entonces. Al cierre de este artículo, más de 170.000 personas habían firmado ya.

El periodista Mario Tascón asegura en su petición que "Pablo fue valiente y dio la cara para denunciar ese hecho, para evitar el dolor de familias como la de Marta, para conseguir un poco de ética en los contenidos de la televisión".

Tascón argumenta que "ahora Telecinco, parte de uno de los mayores grupos de comunicación de Europa, parece querer vengarse contra una persona que simplemente denunció lo que le pareció injusto", y añade que "Telecinco quiere acallar su voz y no debemos permitírselo".

El periodista pide así a las principales marcas que se anuncian en Telecinco, a las que cita en la petición, "que hagan ver a Telecinco lo terriblemente injusto de esta acción y que retiren su publicidad hasta que Telecinco retire la querella contra Pablo".

Francisco Polo, Director de Change.org en España aseguró que "podríamos estar ante un nuevo ejemplo del 'efecto Streisand', en el que un intento de censura acaba siendo divulgado masivamente".

Desde Telecinco se afirmaba en un comunicado que "son las amenazas a nuestros clientes, y no las críticas libremente expresadas, las que nos han llevado a pedir la intervención de la Justicia". La cadena se refiere a las palabras de Herreros que han motivado la demanda: "Cuando el Sr. Herreros decidió mandar una carta a nuestros anunciantes diciendo textualmente: 'si no se adhirieran a nuestra propuesta (retirar a publicidad de La Noria) seguiríamos exigiéndoselo en adelante y promoveríamos un boicot de sus productos' ni está criticando, ni convenciendo. Está amenazando".

"Una cosa es criticar, convencer o disuadir, y otra muy distinta amenazar, que no es, ni más ni menos, que imponer a otro un comportamiento contrario a su voluntad", afirma la cadena, que se muestra "sorprendida" ante la nueva campaña de presión y aseguran que "Mediaset España no pretende silenciar a nadie ni vengarse de nadie".

Según el propio Pablo Herros, la demanda de Telecinco le hace responsable de la pérdida de 3,7 millones de euros, que le reclaman y además, en caso de probarse las coacciones y amenazas de las que le acusan el bloguero se enfrentaría a 3 años de prisión.