Todos los grandes hospitales de Madrid se levantan contra la Comunidad

La Sanidad vuelve a estar en movimiento. Por primera vez desde las protestas de 2008 contra el que fuera consejero de Sanidad regional, Juan José Güemes, los trabajadores de todos los grandes hospitales de la Comunidad de Madrid se han puesto de acuerdo para movilizarse contra las privatizaciones en el sistema de salud anunciadas por el presidente regional, Ignacio González, y el consejero del ramo, Javier Fernández-Lasquetty.

Los últimos en sumarse han sido el Hospital Universitario Ramón y Cajal, el Clínico San Carlos y La Paz. Este martes, y al margen de los equipos directivos, sus asambleas de trabajadores aprobaron encierros y protestas diarias a las puertas con los que denunciarán unas medidas que, aseguran, mermarán la calidad de la sanidad madrileña.

El 31 de octubre, víspera del puente de Todos los Santos, González presentó los presupuestos para 2013. Los mismos contienen un recorte de 1.424 millones de euros que lleva aparejado un duro ajuste sanitario para ahorrar. Entre las medidas para conseguirlo se encuentran la implantación del euro por receta y la cesión a la iniciativa privada del 10% de los centros de salud regionales.

Además, varios hospitales cambiarán por completo sus servicios. El Instituto de Cardiología cerrará, directamente, siendo así el primer hospital público del que el PP prescinde. La gestión sanitaria de otros seis (Infanta Leonor, Infanta Sofía, Infanta Cristina, Henares, Sureste y Tajo) se privatizará, lo que implicará un desplazamiento de sus profesionales funcionarios a otros centros regionales, el despido de los interinos que cubren esas plazas y su recolocación, como mal menor, al servicio de las nuevas gestoras privadas con salarios más bajos y peores condiciones laborales.

Ante este panorama de futuro, los profesionales de La Princesa fueron los primeros en reaccionar. El viernes 2 de noviembre, los trabajadores anunciaban el primero de todos los encierros. En su caso, la Comunidad pretende cerrar servicios como las Urgencias, trasladar a su población de referencia y convertirlo en un centro especializado en Geriatría.

El martes 6, un millar de personas cortó las calles alrededor del centro en contra esta transformación. Al tiempo, el Hospital del Tajo y el del Sureste iniciaban sus encierros. Un día antes había tomado la misma determinación el personal del Hospital Henares (Coslada) y el Infanta Leonor (Vallecas).

Tomando su ejemplo, la 'marea blanca' —como se autodenomina el colectivo sanitario— se ha extendido en forma de encierros, concentraciones y cortes de tráfico diarios a las puertas de cada centro. La reclusión, bien indefinida, por turnos o con relevos, llegó el 7 de noviembre al Infanta Cristina (Parla), al Infanta Sofía (San Sebastián de los Reyes) y al Carlos III, que el Ejecutivo quiere transformar de referencia en enfermedades infecciosas a centro de estancias medias y largas.

El Hospital Infantil Niño Jesús se organizó el 8 de noviembre. Tras ellos se han incorporado los trabajadores del Príncipe de Asturias (Alcalá de Henares), donde hay encierro todos los lunes, el 12 de Octubre y, desde este lunes 12, el Universitario de Getafe, el Severo Ochoa de Leganés y el Gregorio Marañón. También hay que sumar a la lista el Hospital Puerta de Hierro de Majadahonda y el Ernest Lluch de Móstoles. El Hospital de Valdemoro, aunque público no ha vivido un levantamiento similar dado que toda la plantilla, incluidos los médicos, está contratada por la empresa que lo gestiona.

En total, 20 hospitales se han levantado contra las privatizaciones. Sin embargo, hasta el momento, el Gobierno regional no ha mostrado ningún signo de querer marcha atrás en sus planes.

Pese a las protestas diarias y las recogidas de firmas, el único movimiento realizado por la Consejería de Sanidad ha sido una reunión mantenida con la Junta de Personal del Hospital La Princesa. Según un portavoz de los trabajadores, la Consejería está valorando dar marcha atrás a parte de los cambios, lo que permitiría mantener, por ejemplo, el servicio de Urgencias. El departamento que dirige Javier Fernández-Lasquetty no ha querido confirmarlo oficialmente.

La transformación de este hospital ha desatado una polémica entre la alcaldesa de Madrid, que firmó contra la conversión en geriátrico por estar en contra, y el presidente autonómico. Según Ignacio González, la primera edil -y su compañera de partido- "no se ha enterado" de lo que el Ejecutivo plantea hacer con el centro.

Mientras tanto, el PSOE ha anunciado que llevará el euro por receta al Tribunal Constitucional por invasión de competencias nacionales sin esperar a lo que haga el presidente del Gobierno. Mariano Rajoy ha pedido a Ignacio González que retire la iniciativa por considerar que los ciudadanos ya pagan parte de los medicamentos.