El Congreso chileno aprobó, por unanimidad, una declaración que reconoce el proceso que busca poner término a la violencia en el País Vasco, informaron ayer fuentes parlamentarias.

"El Congreso reconoce y felicita el proceso tendente a terminar con el flagelo de la violencia y de la división en el País Vasco", señala el texto, que fue aprobado la noche del miércoles y presentado ayer por el senador democristiano Adolfo Zaldívar al lehendakari, Juan José Ibarretxe, en una breve escala que hizo en el aeropuerto de Santiago.

Ibarretxe llegó ayer a Chile a fin de participar hoy en la ciudad de Iquique, en el norte del país, en la inauguración de un programa de doctorado en Derecho en la Universidad Arturo Prat .

"Este acuerdo fue ampliamente acogido tanto por la Cámara de Diputados como por el Senado", destacó Zaldívar.

Al encuentro asistieron, además de Zaldívar, los diputados Patricio Melero y Gonzalo Uriarte, de la opositora Unión Demócrata Independiente (UDI, derecha), el diputado democristiano Carlos Olivares y el senador de Renovación Nacional (RN, derecha), Sergio Romero.

Zaldívar precisó que "para la nación chilena el aporte vasco trasciende cualquier frontera política, es una relación muy querida por nosotros".

Por ello, dijo, "hemos querido apoyar este proceso de paz, pues no podíamos estar ajenos".

El acuerdo, que fue votado favorablemente por todos los senadores y diputados chilenos, aboga por un "nuevo escenario de paz que permita el libre ejercicio de todas las libertades políticas, respetando plenamente la soberana voluntad democrática del pueblo vasco".

Según la declaración, "la asimilación de los vascos fue determinante para contribuir sin duda a forjar nuestra identidad nacional, al extremo de que un gran pensador como Miguel de Unamuno llegó a decir que Chile es una de las mayores creaciones de ese pueblo".

Por ello, agrega que "los asuntos del pueblo vasco, particularmente la violencia y división que los han asolado desde hace años, nos compromete y preocupa".

En ese sentido, valora "los últimos acontecimientos que dan cuenta de nuevos caminos de paz que se abren para el pueblo vasco, condición indispensable para afianzar una sociedad democrática, próspera y justa".