Las reuniones profesionales mantenidas por la delegación tinerfeña en la presente edición de la feria World Travel Market (WTM) de Londres, que se celebra en la capital británica desde ayer lunes hasta el jueves, están confirmando la consolidación de la isla como destino número uno para los turoperadores británicos en 2013.

Así lo ha destacado el vicepresidente económico y consejero de Turismo del Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso, quien ha resaltado las sensaciones positivas que están teniendo en esta cita turística, que apuntan a que la isla acabará el año en las mismas cifras de británicos que recibió el año pasado, que fueron 1,6 millones.

El consejero ha añadido que tanto en la temporada de invierno que acaba de comenzar, y especialmente en la de verano del año que viene, se prevén importantes aumentos de plazas aéreas y de visitantes a la isla de esa nacionalidad.

Ayer tuvo lugar la presentación de Tenerife ante cerca de un centenar de periodistas acreditados en la feria. La delegación tinerfeña está encabezada por el presidente del Cabildo, Ricardo Melchior, el propio Carlos Alonso y el consejero delegado de Turismo de Tenerife, Miguel Ángel Santos, y está integrada además por los concejales de Turismo de los ayuntamientos de Puerto de la Cruz, Arona, y Adeje, representantes de Ashotel y medio centenar de empresarios del sector.

Durante los cuatro días de feria, la representación isleña celebrará más de 40 encuentros profesionales con turoperadores, líneas aéreas y proveedores on line, entre ellos Monarch Travel Group, Jet2 Holidays, Thomas Cook o TUI, entre otros.

Reino Unido es el principal mercado emisor de turistas a Tenerife por delante de españoles y alemanes. El año pasado 1.600.000 británicos se alojaron en los establecimientos turísticos de la Isla, un 10,6 por ciento que el año anterior. Son, además, los visitantes más fieles, ya que el 57 por ciento ha estado al menos cinco veces en la isla y suelen viajar en pareja.

La renta media familiar del británico que visita Tenerife supera los 51.700 euros, lo que significa que es un 3,3 por ciento más elevada que la del total de visitantes. Casi el 41 por ciento de realizó alguna actividad durante su estancia en la isla, especialmente la visita a parques temáticos, observación de cetáceos y tratamientos de salud.