Les acompañó el líder socialista madrileño, Rafael Simancas, que alertó de que «Europa debe frenar esta política. Mañana puede ser tarde». «Si Bruselas no nos ayuda, sólo nos queda Lourdes», dijo Concepción Núñez, de la plataforma contra el PGOU de Galapagar.

Caso por caso

Galapagar: El PGOU supondría pasar de 32.000 a 70.000 vecinos, pese a «un informe oficial que no garantiza el agua para tanta población». La plataforma denuncia irregularidades en la tramitación, como la aprobación sin exposición pública. Especies como el águila imperial están amenazadas.

Las Rozas: El municipio pasará de 82.000 a 132.000 habitantes, «pero tenemos los mismos servicios que cuando éramos 35.000», según la asociación El Cantizal. El crecimiento supondría la urbanización de 370.000 metros cuadrados protegidos.

Torrelodones: El PGOU prevé 1.500 viviendas para pasar de 20.000 a 30.000 vecinos, y pone en peligro especies como el topillo de cabrera. Además, la asociación de vecinos Torrenat alerta de que el municipio no gestiona sus aguas residuales. «No queremos que se construya hasta lograr la depuración efectiva del agua», reclaman.

Rascafría: El proyecto «propone urbanizar un espacio natural emblemático de la región sin estudio de impacto ambiental», según la plataforma en defensa del valle de Rascafría. El PGOU amenaza la mayor población de buitre negro de la comunidad (40 parejas reproductoras), entre otras especies.

Moralzarzal: El PGOU prevé 1.500 viviendas en Los Praderones, que pertenecen a la zona de transición del parque nacional del Guadarrama, así como un campo de golf en zona protegida, según Gente de Moralzarzal. Milano real, buitre leonado, águila culebrera y mochuelo chico están amenazados.