El municipio malagueño de Álora acoge este martes la proyección del documental 'Mamá, duérmete que yo vigilo', actividad que realiza el Área de Igualdad de la Diputación de Málaga con motivo del Día Internacional contra la Violencia de Género.

Este documental indaga en la realidad de esos menores que han vivido los malos tratos en sus hogares, con sus madres como víctimas principales, reconstruyendo el terror y la indefensión que sufrieron y analiza las secuelas que les quedaron. "Todo ello a través de estremecedores testimonios", ha señalado la diputada de Igualdad y Participación Ciudadana, Pilar Conde, en un comunicado.

Esta proyección, que forma parte de una iniciativa organizada bajo el título 'Cineforums' y que cuenta con la colaboración de ayuntamientos, asociaciones y centros educativos, va acompañado del análisis, reflexión y coloquio a cargo del personal técnico del Área de Igualdad y de la posterior lectura de un manifiesto.

Este documental se proyectará también en los Puntos de Información de la Mujer (PIM) de la Diputación en los municipios malagueños de Cortes de la Frontera, este próximo miércoles; en Riogordo este próximo jueves, Torrox —15 de noviembre—, Fuente de Piedra —16 de noviembre— y Ojén —20 de noviembre—, a la misma hora que lo hará el de Álora, a las 11.00 horas.

CINEFORUMS

Cineforums forma parte del programa puesto en marcha por el ente supramunicipal cuya temática principal son los jóvenes dentro del círculo de la violencia de género, ya que se estima que 840.000 menores en España han estado expuestos a la violencia de género durante el último año, lo que supone más del 10 por ciento de los menores residentes en nuestro país.

Por ello, "desde la Diputación se está haciendo un gran esfuerzo en cuanto a la atención social, psicológica y jurídica de las mujeres que sufren violencia doméstica, pero también de sus hijos, ya que, se considera que cuando la madre se recupera, también ellos lo hacen, pero apenas existen recursos específicos y adecuados para los menores", ha asegurado Conde.

Según los expertos las secuelas principales que padecen los hijos de madres que han sufrido violencia de género son, entre otras, riesgo de imitar comportamientos, problemas físicos y trastornos psicológicos. También los más pequeños sufren regresiones y su desarrollo se ralentiza, para finalmente dar lugar a las conductas más agresivas.