Acorralado por los nuevos tiempos, la presunta superioridad de lo tecnológico sobre lo humano y enemigos cada vez más inescrutables, James Bond se siente mayor. Así es: han sido muchas aventuras vividas (ya ha cumplido medio siglo en el cine), el mundo es cada vez más complejo y hombres como él, eficientes pero indisciplinados, están mal vistos en estos días de burócratas y pasión por los autómatas.

Así que 007 no puede empezar peor esta nueva entrega: es el protagonista de una misión fallida, ve como un enigmático terrorista ataca el corazón del Imperio Británico (algo todavía peor... ¡hasta ha volado por los aires el mismísimo despacho de M!) y, magullado por los golpes y la vida, debe pasar unas humillantes pruebas para ser readmitido en la exclusiva lista de agentes con licencia para matar.

Pero al final, eso sí, habrá luz. Porque al cada vez más triste y sombrío Bond le espera una aventura de las que le gustan, recorriendo medio planeta, rodeado de bellísimas mujeres y, sobre todo, con un enemigo a su altura esperándole al final del camino. Todo eso y más hay en Skyfall, porque la película de Sam Mendes explora los orígenes del héroe, su dolor por los padres ausentes o el complicado futuro que les espera a hombres como él.

Nostálgica y espectacular, profunda y frenética, tan fantástica como siempre pero con un personaje principal más humanizado que nunca, no es de extrañar que Skyfall sea, para muchos, una de las mejores películas de James Bond.

El aire trágico de Craig le sienta bien a Bond, tanto como la llegada del villano de Bardem Porque Daniel Craig vuelve a demostrar que quizá no tenga el carisma de Connery o la elegancia de Moore, pero sí un aroma de bestia condenada y trágica que le sienta muy bien al personaje. Porque el villano, encarnado por Javier Bardem, también eleva el listón: excesivo, demencial, cómico y con un pelo imposible, el español entra en la historia de 007 gracias, entre otras cosas, a una hilarante e inolvidable escena de presentación, en la cual el viril superagente secreto nos desvela, incluso, alguna que otra sorpresa sobre su ajetreada sexualidad.

«Dramática aunque con un trasfondo cómico, Skyfall será considerada por los fieles a Bond como una de las mejores películas de la saga», dicen en The Hollywood Reporter. La revista Empire, como casi todas los demás medios estadounidenses, están de acuerdo: «Skyfall es más de lo que uno espera de un Bond del s.XXI: Moderna pero no amanerada, respetuosa con la tradición pero actual y compleja, tiene momentos de humor que no habíamos visto hasta ahora».

Reino Unido/ EE UU, 2012. Dir.: Sam Mendes. Int.: Daniel Craig, Javier Bardem, Judi Dench. Dur.: 143 min.