"A la ville de... Barsalona". Esta frase pronunciada con acento barcelonés por el presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Juan Antonio Samaranch , en el Palacio de Beaulieu de Lausana (Suiza) convertía a Barcelona en la organizadora de los Juegos Olímpicos de Barcelona hoy hace 20 años.

Aunque no se notará porque el ayuntamiento no hará ningún acto de conmemoración de aquel histórico momento que provocó una explosión de alegría en todo Barcelona y Cataluña.

No era para menos. Se trataba de

Ni tan solo la Exposición Universal del 1929 podía superar este hito.

La primera de España

Barcelona se convirtió en la primera ciudad española en organizar unos Juegos Olímpicos, pero lo más importante fue la transformación urbana que se abordó en la ciudad con aquella excusa.

Los más jóvenes ya se han acostumbrado a las rondas, a ver la Torre de Collserola o a ir a los conciertos del Palau Sant Jordi o del Estadi Olímpic.

Pero ni esto ni el resto de infraestructuras que se hicieron en Barcelona hubieran sido posible sin los Juegos.

El papel de Samaranch

Fue clave el papel de Samaranch en la elección de Barcelona.

A pesar de que a la hora de la votación salió de la sala, el presidente del COI lo tenía todo bien atado.

El trabajo de relaciones públicas que hicieron en la sombra Leopoldo Rodes y Carles Ferrer Salat recibiendo, y casi comprando con regalos, a los miembros del COI influyó. Después esta práctica se prohibió.

La cita olímpica en cifras

1,1 billones de pesetas costaron los Juegos y las infraestructuras.

3,1 billones de pesetas fue el beneficio que obtuvo la ciudad.

Cuatro. Es la posición que Barcelona ocupa en el ránquing europeo. En 1990 era la decimoprimera.

Ocho de septiembre del 2006 fue el día en que se anunció el pago del último recibo de la deuda olímpica.

35.000 voluntarios olímpicos. Nunca había habido tantos.