La ruta de los hayedos: Madrid, Guadalajara y Segovia, en moto

  • El Hayedo de Montejo es un espectáculo natural único de 250 hectáreas.
  • En el Hayedo de la Pedrosa la haya comparte espacio con tejos y abedules.
  • El Hayedo de Tejera Negra conserva ejemplares de más de 300 años.
Luces y sombras en el Hayedo de Montejo, en el norte de Madrid.
Luces y sombras en el Hayedo de Montejo, en el norte de Madrid.
WIKIPEDIA/Jarmad
Luces y sombras en el Hayedo de Montejo, en el norte de Madrid.

En esta ocasión disfrutaremos de un paisaje idílico recorriendo los Hayedos más cercanos a la comunidad madrileña con un recorrido de 396 kilómetros que nos llevará por la Sierra Norte de Madrid hacia tierras de Segovia y Guadalajara. Un lujo para los sentidos a través de carreteras de montaña salpicadas de pueblos con mucho encanto que iremos descubriendo a lo largo de nuestro camino. Los Hayedos de Montejo, Tejera Negra y el de la Pedrosa nos esperan. Es indispensable obtener una reserva previa para poder visitarlos.

Partimos del centro de Madrid con dirección a nuestro primer destino, el Hayedo de Montejo. Los primeros kilómetros discurren por la A-1 dirección Burgos hasta desviarnos en la salida 23. El recorrido nos lo marcan pueblos como Cobeña, Algete y El Casar. Curvas y buen asfalto nos acompañan también junto a Torrelaguna, El Berrueco y Robledillo de la Jara. La carretera se estrecha y podemos encontrar algo de gravilla cruzando el puerto de Puebla de la Sierra hasta llegar a la localidad con el mismo nombre.

Rodeada de picos altos y bosques de pinos, Puebla de la Sierra se sitúa en el Valle de la Puebla, a los pies de la Sierra del Lobosillo. Un paisaje que bien merece una parada para disfrutar del aire de la sierra y sus increíbles vistas. Retomamos la M-130 con dirección a Montejo de la Sierra para acercarnos un poco más a nuestro primer destino. Nos desviamos por la M-137 y recorremos unos pocos kilómetros más hasta pasar el puerto de La Hiruela y encontrarnos con el pueblo con el mismo nombre. Siguiendo por la GU-187 cruzamos el puerto del Cardoso hasta llegar al Hayedo de Montejo.

Naturaleza en estado puro

El Hayedo de Montejo es un espacio natural con una superficie de 250 hectáreas. Un bosque de Hayas acompañados de robles, rebollos o acebos que lo convierten en un espectáculo natural único. Fresnos, cerezos y abedules crecen próximos a las aguas del río Jarama.

El jabalí, los tejones y las nutrias son los mamíferos más representativos de la fauna de esta zona. Tras la parada, volvemos de nuevo hasta la localidad de Montejo de la Sierra para encarrilar la ruta hacia nuestro siguiente enclave natural: El Hayedo de la Pedrosa.

Desde Montejo de la Sierra recuperamos la A-1 para recorrer 17 kilómetros hasta la salida 104, donde nos desviamos dirección a Riaza. Ya en tierras segovianas, paramos en esta villa rodeada de cumbres altas, como el pico del Lobo, con más de 2.000 metros.

Podemos disfrutar de una pincelada de la buena gastronomía segoviana en el asador La Porticada. Un exquisito cochinillo segoviano o unas buenas torrijas caramelizadas son una comida perfecta para coger fuerzas y retomar nuestra ruta.

El encanto de los bosques

Dejamos Riaza por la SG-111 con dirección Riofrío de Riaza, en los límites con la provincia de Guadalajara. En dicho término municipal se encuentra el Hayedo de la Pedrosa. Otro regalo para los sentidos en el que la haya comparte espacio con tejos, abedules y serbales, especialmente en la ladera norte del Puerto de la Quesera.

Poco después encontramos el Hayedo de Tejera Negra, ya en tierras de Guadalajara. Forma parte del macizo de Ayllón. Una extensión de 400 hectáreas de hayas que lo convierten, por su localización, en una de las más meridionales de la península ibérica. Conserva especies con más de 300 años de edad, que pueden llegar a alcanzar alturas de hasta 10 metros.

Tras disfrutar de este espacio natural situado en el término municipal de Cantalojas emprendemos nuestra vuelta a Madrid por la SG-112 con dirección Majaelrayo. Este pueblo se caracteriza por el tono oscuro de las lajas pizarrosas usadas en todas sus construcciones que le han hecho ganarse el nombre de ‘arquitectura negra’.

Desde allí nos dirigimos hasta el Embalse del Valdo y tras cruzar la presa nos dirigimos hacia Valdesotos  hasta llegar a la carretera GU-195. Más tarde tomaremos la GU-123 para llegar a la M-102 y luego al pueblo de Patones. Desde allí continuamos nuestro recorrido hasta Torrelagunas, donde enlazaremos con la A-1 dirección a Madrid.

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