El juzgado de lo Social número siete de Sevilla, finalmente, ha declarado procedente el despido objetivo promovido por la sociedad municipal Limpieza Publica y Protección Ambiental (Lipasam), sobre Augusto G.C., militante del PSOE y otrora técnico de control de calidad de esta empresa pública. Se trata de uno de los seis despidos objetivos promovidos por Lipasam poco después de que el PP desembarcase en la Alcaldía hispalense, todos ellos con efectos sobre militantes del PSOE. La sentencia, no obstante, será objeto de recurso ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), según han informado a Europa Press fuentes del caso.

En al menos uno de los dos juicios previos fue esgrimida una grabación que revelaría supuestas instrucciones del director gerente de Lipasam, Francisco José Juan Rodríguez, para que una trabajadora afectada por estos despidos objetivos y también militante del PSOE conservase su puesto de empleo a través de dos concejales del PP.

En la conversación, grabada tres semanas antes de que esta trabajadora fuese despedida, el gerente aconseja presuntamente a esta mujer un acercamiento a dos concejales concretos del PP, Francisco Pérez y Beltrán Pérez, para conservar su puesto de empleo a cuenta de los despidos previstos entonces como consecuencia de una reestructuración. Francisco José Juan Rodríguez, en un comunicado posterior a que la grabación fuese hecha pública, ha asumido un "error" en este caso, ha negado despidos políticos en Lipasam y ha asegurado que estos seis despidos objetivos "obedecieron a causas organizativas".

La trabajadora le pidió "ayuda"

Durante la vista oral celebrada por el Juzgado de lo Social número siete, según la información recogida por Europa Press, el director gerente de Lipasam fue interrogado sobre el contenido de la mencionada grabación. Francisco José Juan Rodríguez, no obstante, negó seguir directrices políticas y alegó que cuando conversó con esta trabajadora afrontaba "una situación muy difícil" al verse obligado a promover despidos en una empresa pública.

En paralelo, defendió sus "decisiones" a la hora de consumar estos seis despidos objetivos, todos ellos con efectos sobre militantes del PSOE, y esgrimió que a través de las medidas adoptadas desde la cúpula de Lipasam, esta sociedad municipal tiene actualmente "20 personas menos" en su plantilla como consecuencia de despidos y la no renovación de contratos temporales. La empresa, según el director gerente, estaba "sobre dimensionada" precisamente en un momento de contracción del sector público.

Lipasam descarta una "operación de limpieza"

La representación de Augusto G.C., de otro lado, había esgrimido que un informe elaborado por dos consultoras recomendaba la destrucción de 28 puestos de empleo y la reestructuración de Lipasam se redujo entonces a "sólo seis puestos de empleo", en este caso pertenecientes a destacados militantes del PSOE", por lo que reclamaba la nulidad del despido, o subsidiariamente la improcedencia, bajo la premisa de que este puesto de técnico de control de calidad "no sobraba" en la empresa y que concurren numerosos "indicios" que inducen a pensar en un despido derivado de matices políticos.

La representación jurídica de Lipasam, no obstante, negaba una "operación de limpieza" política en esta sociedad municipal y esgrimía el testimonio de la responsable de Recursos Humanos, quien señalaba que numerosos militantes del PSOE siguen trabajando como "encargados o jefes de servicio" en Lipasam pese al desembarco del PP en la Alcaldía de Sevilla, toda vez que incluso miembros del PP se habrían visto afectados por las reestructuraciones de la empresa.