El Ayuntamiento de Málaga, en el marco de la iniciativa Educandotec, ha realizado una encuesta en la que el 83,3 por ciento de los participantes ha reconocido la necesidad de mejorar el control de la seguridad del perfil de los jóvenes en Internet, según ha informado este lunes el concejal del Área de Nuevas Tecnologías, Mario Cortés.

Cortés, que ha recordado que Educandotec persigue analizar de una forma objetiva la penetración de las redes sociales entre los más jóvenes y conocer el perfil del estudiante malagueño en Internet, ha estado acompañado por la coordinadora del Plan Municipal para el Gobierno Abierto, María Victoria Romero, y Rocío García, consejera delegada de Sercoda y autora del trabajo.

En el estudio han participado alumnos de entre 12 a 18 años, así como profesores, mediante la distribución de encuestas entre los asistentes a las charlas ofrecidas por expertos en la materia, que han sido seguidas por cerca de 900 estudiantes de nueve centros escolares de Málaga.

Tras escuchar su intervención, más de las tres cuartas partes de los jóvenes consultados observaron la necesidad de mejorar su protección fundamentalmente frente a tres prácticas: el robo del perfil personal facilitando la posibilidad de que puedan usarlo en contra de su propietario, el uso de fotografías personales en redes con algún fin sexual o el uso de falsa identidad por parte de personas que se agregan al perfil.

Los autores del estudio proponen trabajar directamente sobre los jóvenes, a fin de promover entre ellos un uso responsable y adecuado, tanto de contenidos como de servicios y herramientas, visualizando las posibilidades que ofrecen Internet y las redes sociales en la formación de los jóvenes y proponiendo recomendaciones de uso que garanticen su seguridad personal.

Sobre todo, han indicado, teniendo en cuenta el dato de que el 92 por ciento de los encuestados ha manifestado tener algún perfil creado en Internet, fundamentalmente Tuenti, seguido de Facebook, Youtube, Twitter y My Space. Sólo ocho de cada 100 jóvenes reconocen que no utilizan las redes sociales.

Datos en el perfil

La encuesta ha desvelado que aún hay un 8,3 por ciento de jóvenes que incluye en su perfil su dirección personal y un 10,1 por ciento, su número de teléfono. Mucho más generalizada es la inclusión de fotos personales —el 64,9 por ciento— o la del nombre completo —75,9 por ciento—, siendo la visita de perfiles de amigos o la carga y el comentario de fotos y vídeos, además de la mensajería instantánea, las actividades más desarrolladas.

En cuanto a la frecuencia, el 64,8 por ciento de los jóvenes se conecta a Internet a diario, de los que un 39,3 por ciento lo hace varias veces al día. Si se observa el medio elegido para la conexión, el preferido es el ordenador portátil —72,6 por ciento—, seguido del teléfono móvil —51,8 por ciento—. Este último dispositivo tiene mucha menor presencia entre los internautas de 10 y 11 años, aunque es el mayoritario entre los de 15 y 16 años.

Para los jóvenes consultados, las redes sociales son un modo de relación con amigos habituales —91,2 por ciento— y, en menor medida, para escuchar música —36,9 por ciento—. No obstante, también se emplea para estar informados de eventos sociales —33,3 por ciento— o conocer gente nueva —19,1 por ciento— y jugar a videojuegos —16,9 por ciento—, según se desprende de la encuesta.

En lo que se refiere a la seguridad, el 88 por ciento de los jóvenes ha manifestado que conoce cómo modificar la configuración de su perfil, aunque el grupo de edad comprendida entre los 10 y 11 años cuenta con una importante presencia de adolescentes que desconocen incluso cuál es su nivel de privacidad.

Según han señalado, este dato resulta "especialmente importante" si se tiene en cuenta el hecho de que sólo el 50 por ciento de los hogares cuenta con normas de uso de Internet e, incluso, que el 47,4 por ciento de los padres ni siquiera usan las redes sociales.

Entre las normas de uso existentes, destaca la presencia de un grupo de adolescentes a los que sus padres no les permiten utilizar las redes sociales —un siete por ciento—. Del 93 por ciento restante que sí tiene vía libre, solo los padres del 9,1 por ciento de los jóvenes controlan el lugar desde el que acceden a Internet y los del 12,6 por ciento configuran la privacidad de su perfil en las redes sociales.