Dos embajadas europeas han sido asaltadas este viernes en Sudán. Primero, la alemana, que fue atacada por decenas de manifestantes. Después, la británica. Ambos asaltos están relacionados con las protestas contra un vídeo en el que se caricaturiza a Mahoma y se suman a otras que se han desarrollado en países como Egipto, Yemen o Líbano. El conflicto en Sudán fue a más y se registró poco después al menos tres muertes cerca de la embajada de EE UU, donde también hubo protestas.

Primero, decenas de manifestantes irrumpieron en la embajada de Alemania en Sudán, situada en el centro de Jartum, tras escalar el muro que cerca el recinto. Los manifestantes prendieron fuego en el exterior de la tapia, sin que la policía pudiera evitar que entraran dentro.

Poco después, decenas de personas irrumpieron brevemente en la embajada del Reino Unido, cercana a la alemana. En ambos casos no se produjeron heridos.

Estas manifestaciones se produjeron tras el rezo del mediodía de las mezquitas de la capital para protestar contra el vídeo del profeta Mahoma, considerado blasfemo por los musulmanes y supuestamente producido en EE UU. Los manifestantes también salieron a las calles para expresar su repulsa por una caricaturas del Mahoma, que, según ellos, han sido publicadas hace unas semanas en la prensa alemana.

Los testigos señalaron que los asistentes a las protestas corearon lemas contra EE UU y Alemania, y pidieron al Gobierno de Jartum que cierre ambas legaciones y expulse a los embajadores.

En la embajada de EE UU, las protestas terminaron con al menos tres muertos y 40 heridos por los enfrentamientos entre la policía y manifestantes, dijo uno de los organizadores de la protesta, Mohamed Abderrahim. Miembro de la Organización Popular para la Defensa del Profeta de Alá, Abderrahim precisó que una de las víctimas fue atropellada por un coche policial, mientras que dos manifestantes murieron por disparos de las fuerzas de seguridad.