Gómez-Pumar defiende los beneficios de la liberalización ferroviaria y llama a los sindicatos al diálogo

El presidente de Renfe cree que en España "no hay sitio" para "demasiados" competidores
Presidente Renfe
Presidente Renfe
EUROPA PRESS
Presidente Renfe

El presidente de Renfe, Julio Gómez-Pumar, ha defendido este miércoles en Santander los beneficios de mejora de la calidad, reducción de costes de funcionamiento y creación de empleo que a su juicio traerá consigo la liberalización del mercado ferroviario español, al tiempo que ha realizado una "llamada a la responsabilidad y el diálogo" a los sindicatos.

En este sentido, ha afirmado que la huelga en el transporte público "daña gravemente a la economía" y "perjudica a millones de usuarios que no entienden por qué sus derechos se ven violentados por una empresa de servicios públicos", además de que "no tienen mucho sentido".

Y es que, tras la liberalización, Renfe seguirá siendo "el operador público de referencia" en España pero también será "clave" en países como Arabia, Brasil o Rusia, ha asegurado.

"Fomento tiene un modelo claro de a dónde quiere ir y la liberalización supondrá un beneficio para los españoles", ha insistido, así como que los "ajustes" y "reorganizaciones" que se tienen que acometer redundarán en un "mejor servicio público" puesto que traerán consigo "empleo, innovación y nuevas oportunidades".

De ahí que haya confiado que, junto con los trabajadores de la compañía, "seamos capaces de superar las dificultades, hablar y operar un mejor ferrocarril a todos los ciudadanos".

Gómez-Pumar se ha pronunciado así en la conferencia que ha impartido en el seminario 'Las infraestructuras en España: un reto de futuro', que se celebra en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), donde ha explicado el proceso de reorganización de la empresa ferroviaria ante la liberalización del transporte de viajeros que se iniciará el 31 de julio de 2013 según recoge el Real Decreto 22/2012 de 20 de julio.

Al respecto, ha destacado que el Real Decreto establece "un camino claro de futuro" en el que Renfe seguirá siendo "el operador público de referencia", al tiempo que se organizarán sociedades mercantiles para "poder competir, mejorar la productividad y alcanzar una eficiencia que hoy no tiene" la compañía.

Además, ha afirmado que la liberalización presenta "importantes ventajas y ahorros a los consumidores" y aumenta el empleo y las oportunidades en los sectores afectados, al contrario de lo que se plantea desde los sindicatos ferroviarios, ha dicho, denunciado que éstos la ven como "una barrera para el progreso" y la equiparan con "privatización", un término "demonizado", cuando no son lo mismo, ha insistido, recordando que la primera abre el mercado a la competencia tanto de empresas de titularidad privada como pública.

Al hilo, ha subrayado la intención de Renfe de llevar a cabo este proceso de liberalización "con diálogo y respeto a los trabajadores y profesionales" de la compañía, que se adelanta así a las directrices de la Unión Europea que en 2014 ó 2015 obligarán a abrir los mercados como ya han hecho otros países como Bélgica, Suecia o Dinamarca.

En este sentido, ha considerado que este camino europeo de progresiva liberalización de los mercados es "la vía adecuada para ganar en eficiencia y abaratar costes" además de que "mantendrá o mejorará" los estándares de calidad y una inversión "adecuada".

Muy limitados competidores

Con todo, el presidente de Renfe ha subrayado que "no cabe esperar" que la liberalización del mercado ferroviario atraiga a un número "excesivo" de empresas.

"El mercado de la operación ferroviaria puede mejorar, sin duda, incorporando competidores tanto en la fórmula de competencia en el mercado como en la de competencia por el mercado, y es preferible que la competencia provenga de empresas privadas. Pero es un mercado que admite un número muy limitado de competidores: en mi opinión, no hay sitio para demasiados", ha incidido.

También en relación a los competidores, ha avanzado que actualmente hay un excedente de trenes de alta velocidad que, por la fórmula del arrendamiento, podrán quedar a disposición de competidores interesados. Aunque los precios no se han definido, ha adelantado que Renfe tendrán que ofrecer el material a un precio "consistente" al del mercado, obteniendo un beneficio "razonable".

Con todo, ha señalado que será Fomento quien organice y decida todo el proceso de liberalización, en el que Renfe "dará su opinión", y que afecta a cuestiones como los mercados propicios para la competencia, la determinación de las líneas de servicio público, concesiones, etcétera. Una función que "no es sencilla", ha reconocido. También ha dicho que habrá "un regulador" que velará por su correcto funcionamiento aunque su fórmula depende del Gobierno.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento