La gran mayoría de las grandes cadenas están adoptando la decisión de asumir la subida del IVA a partir del 1 de septiembre, sin incrementar el precio de sus productos o servicios para que no repercuta en los consumidores. Al menos de momento.

Son sobre todo aquellas que lideran el mercado  las que han optado por la difícil opción de reducir sus beneficios con tal de no perder cuota de mercado.  En el caso de Mercadona e Inditex, todos sus productos conservarán el precio previo a la subida del IVA. IKEA los mantendrá en dos tercios de su catálogo y los reducirá en el otro tercio. Eroski, Carrefour o El Corte Inglés mantendrán el precio en parte de sus productos.

También las franquicias, de distintos sectores de actividad, están comunicando que serán las que asuman, según ha informado este miércoles la Asociación Española de Franquiciadores (AEF).

El presidente de esta patronal, Xavier Vallhonrat, ha señalado que la subida del IVA hasta el 21% supone "un serio revés" para el consumo, puesto que no incentiva las ventas ni la confianza de los consumidores. "Es un obstáculo más en el día a día de los empresarios para sacar adelante sus negocios", ha denunciado.

No obstante, y a pesar de mostrarse contrario a la subida de este impuesto, el presidente de la AEF ha señalado que "el sistema de franquicias siempre ha sabido sobreponerse y adaptarse a este tipo de situaciones", ha indicado el gerente de la AEF, Eduardo Abadía.

No obstante, la mayoría de los economistas sostienen que, pese a estas medidas, el IVA acabará repercutiendo en el consumidor final.

FACUA ha  reclamado al Gobierno y las Comunidades Autónomas que investiguen la evolución de los precios de las empresas de distribución que están anunciando que no repercutirán la subida del IVA.

Su portavoz, Rubén Sánchez, asegura que "numerosos consumidores nos trasladan, y es un clamor en las redes, que hay grandes empresas que acaban de incrementar los precios de muchos productos".