Perros, muchos perros –en torno a 300-, y más de un millar de personas de todas las edades –los organizadores habían calculado, días antes, que irían no más de 150 manifestantes-, se han reunido este fin de semana en el parque de El Retiro de Madrid con un objetivo único.

La idea era protestar contra el maltrato a los animales, y reclamar una Ley Nacional que sancione con dureza, y de manera uniforme en todo el país, esta constante y habitual lacra.

"La Ley Nacional está cerca, pero hay que seguir presionando y denunciando para conseguirla (...), hay que llenar los juzgados de denuncias", ha asegurado Nacho Paunero, presidente de El Refugio, que organizó la protesta en coordinación con la asociación gallega ERVA -que hizo lo propio en Ribeira-.

"Ya no es como antes que te mandaban al Ayuntamiento, ahora el maltrato a los animales está penado con tres meses a un año de cárcel y debemos utilizar este Código Penal", indicó.

Antigua exigencia

Lo cierto es que la petición de una Ley Nacional contra el maltrato animal no es nueva.

"Llevamos dos años manteniendo conversaciones con grupos parlamentarios, y de hecho hay tres iniciativas parlamentarias, del PSOE, el PP y CIU, que demuestran que hay un sentir entre los políticos”, ha informado Paunero.

Sin embargo, ha tenido que ser una brutal y mortal paliza -la que un vecino de Aguiño le propinó a su pastor alemán ante la cámara de su vecino veterinario-, o noticias como la de la vecina de Alboraya (Valencia), que arrojó a su perro por el balcón, las que han devuelto a las primeras planas un problema que lleva latente desde tiempos inmemoriales.

"Es importante la figura del Defensor de los Animales, acabar con el sacrificio como alternativa para los perros abandonados –algo que ya recoge la ley catalana-, o prohibir la venta en establecimientos", ha afirmado Paunero.

Leyes contra la crueldad

"El ser humano es el único cruel que hay en el planeta (...), si disfrutas con el dolor de un animal no eres un ser humano, eres un monstruo".

Estas palabras de filósofo y escritor portugués, José Saramago –reproducidas ante los presentes en El Retiro por Alicia Camacho, secretaria general técnica del Ministerio de Medio Ambiente-, reflejaban el sentir general de la protesta.

"Hay que luchar contra la crueldad con los animales, conseguir leyes que los protejan de quienes son inteligentes pero salvajes, y amarlos aunque sea sólo la mitad de lo que nos aman nuestras mascotas", agregó el magistrado del Tribunal Supremo Adolfo Prego.

Alusiones a Juan Lado

No faltaron las alusiones a Juan Lado, agresor del perro de Aguiño, ni a los vecinos que le apoyaban.

"Aquellos que hacen lo que ha hecho la bestia de Galicia, o los energúmenos que le apoyaban, son un peligro para la sociedad (...), el 80% de las personas que maltratan a los animales, terminan delinquiendo”, argumentó la escritora y periodista Rosa Montero, basándose en un estudio de una universidad escocesa.

"El que maltrata a un animal no sentirá nada por los débiles, por los niños o por las mujeres (...), pero maltratará a un perro porque es más fácil", aportó en esta misma línea la fotógrafa Oukalele.

No faltaron los toros

"Estamos en contra del maltrato a todos los animales (...), cuando veamos una corrida de toros, un encierro, pensemos que a los que les clavan la espada, a los que les ponen la banderilla, son nuestros gatos o nuestros perros".

Así de explícito se mostró el coordinador de Ecologistas en Acción, Theo Oberhuber, en la primera –que no única-, alusión que se hizo a la "fiesta nacional".

Todos los presentes tenían claro el "gran problema" que representan las corridas de toros.

En este sentido, Rosa Montero recomendó desligar la lucha contra el maltrato de animales domésticos de la de los toros por una cuestión "puramente práctica": "Hay que perseguir hasta la muerte las fiestas populares en las que no hay orden, como el Toro de Tordesillas, y dejar la fiesta reglada para un segundo momento, sin dejar de decir que es una burrada".

Iniciativa de Ribeira

La iniciativa de esta manifestación, realmente, partió de Ribeira (Coruña) -localidad en la que se produjo la lamentable paliza de un pastor alemán por parte de Juan Lado-.

Allí, varios centenares de manifestantes rechazaron la actitud de Lado y de los vecinos que le apoyaron, y mostraron su apoyo al veterinario que grabó las imágenes de la discordia.

La marcha, convocada por el Comité Local de Ribeira contra el Maltrato a los Animales, contó con el apoyo de colectivos ecologistas de toda Galicia.

"Hay que decir no al maltrato de los seres vivos, no al maltrato de los animales y no a las leyes obsoletas por las que se está rigiendo todo el mundo", explicó Javier García Calleja, presidente de la Unión de Protectoras de Animales Federadas de Galicia (UPAFGA).

En cualquier caso, García quiso dejar claro que la finalidad de esta manifestación "no es hacer ningún segundo juicio a nadie", sino simplemente manifestar su "repulsa contra los malos tratos y la crueldad contra los animales".